BQ Aquaris X y Aquaris X Pro: las armas de la marca española para conquistar a usuarios exigentes

Cuando BQ nos convocó el pasado mes de septiembre muchos estábamos esperando una gama completa de smartphones que fuese desde la gama de entrada, teléfonos por debajo de 200 euros, hasta opciones más punteras, que pudiesen atraer a usuarios que incluso puedan considerar la compra de un gama alta. En cambio lo que nos encontramos fueron los BQ Aquaris U, que compartían el mismo tamaño de pantalla con tres configuraciones distintas que tampoco se adentraban demasiado en la gama media.

Aunque pudo resultar raro, el movimiento de la marca española no dejaba de ser inteligente, centrándose en recuperar a los usuarios que no requieren de un smartphone especialmente puntero o que no tienen tanto presupuesto, para los que la gama Aquaris M era demasiado cara. Aun así el smartphone de BQ más vendido en 2016 fue el Aquaris X5, por lo que estaba claro que era la gama más alta de la marca merecía una renovación, que hoy llega en forma de Aquaris X y Aquaris X Pro.

Con un diseño muy similar a los BQ Aquaris U pero con un paso más allá en características, la marca española ha presentado hoy su renovada gama media. Se trata de una apuesta por hacerse con esos usuarios exigentes que llevaban tiempo sin recibir nuevas apuestas de BQ, con un procesador y memorias que pueden estar a la altura de la gran mayoría de usuarios y que a la vez cuenta con cámaras aparentemente atractivas, el punto flaco de muchos BQ. Hagamos primero un repaso a las especificaciones.

BQ Aquaris X y Aquaris X Pro, características

Como podéis ver, los nuevos BQ entran de lleno en la gama media, por no decir casi en la alta, con un procesador Qualcomm que está por debajo de la gama 8XX pero que promete un rendimiento muy alto, acompañado de 3 o 4 GB de RAM según el modelo que escojamos. Al igual que en la gama Aquaris U, BQ ha optado por un solo tamaño de pantalla, 5,2 pulgadas, alejándose de esa tendencia de muchos fabricantes de irse hasta las 5,5 pulgadas.

Pero más allá de pantallas, procesadores y memoria, donde ha apostado fuerte en esta ocasión BQ es en el aspecto fotográfico. Ha sido su punto flaco en muchos de sus terminales y para solucionarlo ha recurrido a sensores de Sony y Samsung que a falta de llegar a nuestros manos resultan prometedores. Más allá de mejorar los resultados en condiciones complicadas, el punto fuerte también estará en la grabación de vídeo, que en ambos modelos ofrece 4K a 30 frames por segundo y un modo slow motion a 720p.

La última diferencia entre ambos modelos está en los materiales empleados en su construcción. Ambos cuentan con acabado 2.5D para la pantalla pero mientras en el Aquaris X se emplea aluminio anodizado en los bordes y policarbonato en el resto del cuerpo, en el Aquaris X Pro se usa el aluminio anodizado combinado con cristal 3D en la parte trasera.

Un precio acorde a las características

Como decíamos anteriormente, los nuevos BQ Aquaris X tiene unas características que sobre el papel los hacen candidatos a llegar a las manos de casi cualquier tipo de usuario. Aunque no lleven los mejores Snapdragon en su interior, el rendimiento parece que será bastante elevado. Ahora, para poder dar el salto de calidad que ha dado BQ entre los Aquaris X y los anteriores Aquaris X5 el precio también ha tenido que subir.

Si los X5 partían de 219,90 euros y llegaban a 319,90 euros en la mejor versión del Plus, los BQ Aquaris X5 empiezan por 279,90 euros, pasando por 359,90 euros de la versión de 64 GB de almacenamiento interno del X Pro y hasta los 399,90 euros del X Pro de 128 GB. Tal subida de precio es arriesgada, ya que BQ siempre ha sido siempre percibida como una marca económica, y la mejora en especificaciones la puede justificar, pero tendremos que ver cuál es la recepción entre los usuarios, que podrán hacerse con un Aquaris X a partir de la primera semana de mayo y un Aquaris X Pro a partir de junio.