Hace una año precisamente pudimos ver en el MWC una combinación de accesorios en torno al Motorola Atrix, es ahora Asus la que sigue un estilo similar y se arriesga en ese complicado mundo de los accesorios con el Asus Padfone para hacer evolucionar un Smartphone hacia tablet e incluso hacia mini portátil.
Asus Padfone como sinónimo de versatilidad
Ya con Motorola la apuesta fue arriesgada, pero Asus parece dispuesta a reescribir la historia con accesorios que mejoran aquella idea original en su conjunto.
Para empezar, el Asus Padfone se introduce dentro de la tableta (Padfone Station) en un alojamiento específico que hace que quede completamente integrado en el cuerpo de la misma.
Una vez introducido en la tableta, mantenemos una transición prácticamente transparente entre el menú del teléfono y el que tendremos en el nuevo dispositivo, jugando con Android 4.0 (Ice Cream Sandwich). Uno proporciona la potencia de procesado (el Padfone) y el otro multiplica por cinco su batería (el convertidor en tablet).
Y una vez en este punto podemos acoplar un teclado, al igual que hacíamos con el Asus Transformer, con lo que ya hemos evolucionado por completo a nuestro dispositivo desde un Smartphone hasta un notebook en toda regla y con lector SD.
Pero Asus va más allá, y es que el tablet incorpora un lápiz digital con conectividad Bluetooh que nos permitirá usarlo sobre la pantalla o a modo de auricular para recibir llamadas de teléfono, una curiosa doble vertiente que aunque extraña es bastante útil cuando nuestro teléfono está bajo las tripas de los accesorios comentados anteriormente.
Especificaciones técnicas
Ahora que ya hemos visto qué es el Padfone, vamos a ver qué usa para moverse en todos esos múltiples entornos posibles.
La pantalla del Asus Padfone consta de 4.3 pulgadas con tecnología superamoled y resolución qHD de 960x540 pixels. Procesador Qualcomm Snapdragon S4 (falta por ver la velocidad final) y GPU Adreno 225 y 1GB de RAM para mover Android 4.0 (Ice Cream Sandwich).
La pantalla llama mucho la atención por su calidad y los acabados del teléfono metálicos van a juego en ese aspecto. Además tenemos una cámara de 8 megapixels que se mantendrá utilizable en el accesorio tableta.
Su convertidor en tablet nos deja un dispositivo de 10.1 pulgadas con las mismas características heredadas desde el Padfone y ganando en batería (cinco veces superior a la de serie), resolución a 1280x800 y salida micro HDMI.
Falta confirmar si el dock del teclado será el que ya conocemos de la serie Transformer o uno específico para el Padfone.
Conclusiones
Volvemos a elaborar la teoría de la suposición. El Asus Padfone es una buena idea, pero muy complicada de llevar a cabo. El primer obstáculo es el precio, sabemos que esos accesorios no serán baratos, máxime siendo un terminal de altísima gama en sus características. Pero aún no están confirmados.
En segundo lugar, con certeza estos accesorios que no se venderán conjuntamente con el terminal en el pack de venta, provocarán que para adquirir o si quiera tener conocimiento de la existencia de ellos habrá que recurrir a tiendas on line, perdiendo un público potencial de usuario casual importante.
Y en último lugar, el factor que suele pesar bastante en el éxito de un terminal en nuestro país, el hecho de que existan acuerdos con operadores que faciliten su adquisición en sus distintas variantes.
Pero insistimos, la idea no es mala, lo complicado es conseguir llevarla a buen puerto y conseguir cumplir premisas para acercar el producto al usuario, y parte de esta película ya la vimos con el Motorola Atrix en su día.
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