No son pocas las voces que reclaman desde hace años que Xiaomi dé un paso definitivo en busca de la conquista internacional. El propio Hugo Barra, que llegó de Google y ahora ha abandonado la compañía para marcharse a Facebook, fue contratado con ese propósito. Liderar a la compañía en su adaptación a un mercado mundial bien distinto en muchos aspectos al que el fabricante enfrenta en su propio país.
Esta expansión internacional está produciéndose pero lo cierto es que está siendo demasiado lenta. Durante los últimos años, Xiaomi ha instalado algunas fábricas lejos de China e incluso se ha lanzado a vender algunos modelos en India, el que es actualmente el segundo mercado a nivel mundial para la tecnología móvil. Su siguiente paso no será pronto pero ya está fijado: llegar a Estados Unidos en 2019.
Primeros los accesorios, después los teléfonos
Los primeros pasos en este sentido ya se dieron el pasado mes de noviembre de 2016. Xiaomi comenzó a vender algunos de sus accesorios en terreno norteamericano pero no hubo rastro alguno de sus teléfonos móviles. La intención del fabricante chino era la de ofrecer sus terminales Mi, los líderes de su catálogo, en Estados Unidos, pero se trataba entonces de un plan sin fecha.
Frente a Xiaomi, las entidades reguladoras americanas, poco duchas a que las marcas chinas campen a sus anchas por su país y compitan con fabricantes de otras regiones. Como parte de este refuerzo para la expansión, Xiaomi llegó a comprar un gran paquete de patentes a Microsoft, de cara a futuros intercambios y negociaciones con parte de su competencia.
Ahora ha hablado el vicepresidente senior de Xiaomi para comenzar a fijar algunas fechas en el horizonte. Wang Xiang ha hablado para CNET y ha colocado el año 2019 sobre la mesa, una fecha en la que el fabricante oriental confía en estar ya comercializando sus teléfonos móviles en el país norteamericano, aunque para lograrlo tendrá que enfrentar algunos problemas. Problemas que no lo son tanto.
Según Xiang, Xiaomi está tratando de solucionar el problema de la compatibilidad con las distintas bandas LTE que operan en Estados Unidos, y también cómo tratar con cada uno de los operadores del país. Este problema de compatibilidad con las redes se soluciona en otras partes del mundo a través del módem del propio teléfono, e incluso Xiaomi cuenta con modelos destinados a países con bandas FDD-LTE, por lo que el último escollo sería la negociación con las operadoras.
Así pues, podemos comenzar la cuenta atrás para el desembarco oficial de Xiaomi en Estados Unidos. Así, USA iría tras India y abriría la puerta a que, definitivamente, el fabricante se abriese al resto del mundo avalado por la gran presencia de Android a nivel internacional. Confiemos en que todo siga su curso y en unos años podamos considerar a Xiaomi como una marca global de pleno derecho.
Vía | The Next Web
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