A pesar de tratarse de una marca netamente europea, la neerlandesa Philips ha logrado hacerse un hueco en el gigantesco mercado de la telefonía móvil chino. Sin embargo, lejos de producir terminales de alta gama en cuanto a prestaciones, se centra en la comercialización de dispositivos que tratan de sacar tajada de las carencias que algunos otros pueden presentar, como puede ser la autonomía de las baterías. Es entonces cuando terminales como el Philips W732 entra en escena prometiendo hasta 13 horas de conversación y casi 11 horas de navegación continuada, antes de que la batería se agote.
Pues es esa la mayor de las virtudes de un dispositivo que se adentra en el territorio del Motorola RAZR MAXX, dando cabida en sus entrañas a una pila de 2.400 mAh.
Capaz de funcionar tanto en redes GSM como WCDMA, este smarpthone de nombre un tanto difícil de recordar, alcanza poco más del centímetro de grosor al tiempo que muestra unas generosas proporciones para encajar el panel LCD IPS de 4.3 pulgadas con una resolución de 800×480 píxeles, con un menor consumo en términos de navegación que los habituales AMOLED.
Entre otras florituras, esta última creación de Philips es capaz de mover Android 4.0 Ice Cream Sandwich gracias a un procesador mononúcleo MediaTek MT6575 a 1 GHz, permitiendo conexiones HSDPA y HSUPA de hasta 7.2 Mb/s y 5.76 Mb/s respectivamente, además de las tradicionales Wi-Fi, Bluetooth y GPS. Todo ello aderezado con una discreta cámara de 5 megapíxeles.
Disponible en las próximas semanas en el mercado del gigante asiático en diferentes colores, dispondrá de una versión equipada con doble tarjeta SIM.
Vía | IT168 (Google Translate).