Enfrentamos al Snapdragon 865 contra el Snapdragon 855: qué ha cambiado en el año en que llegó el vídeo 8K

Ya ha pasado un año desde el pasado Summit de Qualcomm en Maui. En el lugar habitual de las grandes presentaciones del gigante americano de los procesadores nació el Snapdragon 855. El llamado a liderar la línea de Qualcomm durante todo 2019, aunque posteriormente irrumpió el 855+, cumple un año de edad y se presenta su reemplazo: el Snapdragon 865 ya está entre nosotros y supone cambios sobre la pasada generación.

Ya el pasado ejercicio tuvimos 5G en la élite de Qualcomm aunque entonces se trataba de un 5G limitado y siempre opcional. Cada fabricante elegía si optar por el módem de serie o añadir uno extra, y ahora todo ha cambiado. Pero este Snapdragon 865 introduce otras novedades y supone también un salto lógico en potencia. Vamos a ir paso a paso.

Nueva arquitectura de núcleos y potencia aumentada

Es lógico saltar en potencia cuando hay cambio de procesadores, más aún cuando ha transcurrido un año entre uno y otro. El Snapdragon 855, por ejemplo, optó por núcleos Cortex A76 para sus Kryo personalizados mientras que este Snapdragon 865 lo apuesta todo al Cortex A77. Un diseño más avanzado y más potente, pese a que la velocidad de reloj, de 2,84GHz, pueda parecernos la misma.

Con los nuevos Kryo 585, Qualcomm nos promete un 25% de potencia añadida frente al Snapdragon 855 pero también un 25% de eficiencia energética adicional. La GPU también avanza y con la nueva Adreno 650 tenemos un 20% de potencia extra frente a la Adreno 640 de la generación anterior.

El salto adelante está también presente en el chip para inteligencia artificial, un Hexagon 698 que ahora es compatible con Tensor y que ofrece no sólo cuatro veces más velocidad de procesamiento por segundo sino que consume un 35% menos. Por último, el soporte para pantallas crece. Ahora se pueden montar paneles de 144Hz si bajamos la resolución al QHD+, lo que seguro será una buena noticia para el entorno 'gaming'.

Por último, el nuevo Snapdragon 865 introduce el soporte para las nuevas memorias RAM LPDDR5 frente a las LPDDR4X que eran el techo del Snapdragon 855. Nuevas memorias, más velocidad pues ahora podrán alcanzar los 2,7GHz de velocidad, una cifra más que considerable. Sobre todo, y nos repetimos, para el 'gaming'.

En fotografía manda el "2": 200 megapíxeles y 2 gigapíxeles por segundo

El pasado ejercicio, con el Snapdragon 855 en la mano, podíamos tener un máximo de 192 megapíxeles en un único sensor. Procesar estos datos implicaba perder algoritmos como el de reducción de ruido o el zero shutter lag, pero se soportaban. Un año después la cifra aumenta hasta los 200 megapíxeles, pero el gran salto se produce en los números con filtros aplicados.

48 megapíxeles como máximo en el Snapdragon 855, así jugábamos el año pasado. Ahora podemos mover sensores individuales de 64 megapíxeles y, lo más importantes, pueden formar parejas. 64 y 64, en lugar de los 22 y 22 del pasado ejercicio. Todo ello gracias a que a potencia de procesamiento fotográfico de este Snapdragon 865 que acaba de llegar llega a los 2 gigapíxeles por segundo.

El salto en vídeo también es evidente, sobre todo porque con el Snapdragon 865 llega el vídeo en 8K, que podemos grabar a 30 fotogramas por segundo. El 4K sube hasta los 120 fotogramas por segundo, el doble que el pasado año que sólo se alcanzaban 60 fotogramas por segundo. Y sí, repiten el HDR10 y el HDR10+, hay cosas en la gama alta que nunca se pierden.

El gran salto en conectividad: 5G para todos

Decíamos en la introducción que con el Snapdragon 855 podíamos elegir entre tener 5G o no tenerlo. Elegir si fuésemos fabricantes, claro. El procesador integrado en el chip era el Snapdragon X24 que ofrecía, y ofrece, 4G pero se podía montar un X50 adicional para ampliar la conectividad. Ahora el Snapdragon 865 llega con el Snapdragon X55 unido a su núcleo de forma indivisible.

Eso no sólo significa que todos los móviles con el Snapdragon 865 tendrán 5G sino que además podrán conectarse a redes 5G SA y NSA, frente a las NSA del procesador que hoy deja de ser el nuevo. Con el Snapdragon 865 se alcanzan velocidades de hasta 7,5Gbps en bajada y de 3,5Gbps en subida, lo que es un aumento considerable. Pero el gran salto se basa en la compatibilidad: en esta generación podremos conectarnos a todo.

A todo significa a todo. 5G en todas sus formas, WiFi 6 (ax), WiFi de 60GHz, Bluetooth 5.1 y demás. Además de contar con soporte para todo tipo de seguridad biométrica (desde huellas a reconocimiento de iris) y cifrado para móviles del más alto nivel. Como vemos, el salto de Qualcomm en un año es reseñable aunque tal vez quede un poco empañado por ese paso intermedio que fue el Snapdragon 855+.

Snapdragon 865 vs Snapdragon 855: las características técnicas