El Samsung Galaxy S8 puede estrenar un diseño renovado, y con inteligencia artificial

Por unas razones u otras, Samsung siempre está en la primera plana de los medios tecnológicos. No en vano se trata de uno de los mayores constructores a nivel mundial, y el líder del sector de los smartphones en el que nos adentramos ahora. El motivo no es otro que el de su futuro Samsung Galaxy S8, un terminal llamado a seguir comandando el mercado en el próximo año y del que ya vamos teniendo una imagen más o menos definida.

El futuro S8 será igualmente importante para Samsung pues en él residirá buena parte de las esperanzas del fabricante para mejorar su imagen y sus beneficios. Una imagen dañada por el ya extinto Galaxy Note 7 y que podría remontar si el Galaxy S8 cumple con lo que las filtraciones prometen. Conocíamos algo sobre su futuro procesador, sobre su orientación hacia la realidad virtual y ahora también sobre la integración con Viv y un posible salto estético, aunque quizá se trate únicamente de seguir evolucionando el diseño actual.

No lo decimos nosotros, lo dice Samsung

Desde el seno de la compañía coreana se refieren al futuro Galaxy S8, concretamente sobre su diseño, con una expresión, "slick design", que nos hizo pensar en que posiblemente se tratase más de ajustes menores que de un cambio total en la línea. Recordemos que el Samsung Galaxy S6 ya rompió con la anterior línea de diseño de Samsung y que este Galaxy S8 sería su tercera generación. El Note 7 representó, sin embargo, un paso adelante y el S8 podría continuar evolucionando.

Seguimos esperando algunas modificaciones en la línea de diseño de Samsung como, por ejemplo, que acabe por esconder la cámara por completo en el cuerpo, restando a su diseño esa pequeña joroba que ha continuado hasta el Note 7. Pero precisamente su presencia en el último modelo, y dado que éste debía servir como una referencia de diseño para el S8, nos hace pensar que la cámara, más allá de incorporar un posible doble sensor, no sufrirá un cambio estético demasiado notable. Ya habrá tiempo de ver si desde Samsung consiguen que sea "impecable".

Hablando de la cámara, Samsung también ha comentado que quiere llevar al S8 una cámara mejorada. No es tampoco ninguna novedad pues cada generación de la línea S, algo que ocurre en todos lo fabricantes, ha venido presentando propuestas mejoradas en el aspecto fotográfico. La mención de ese detalle por parte de Samsung, sin embargo, hace pensar que podría ser algo más importante.

No debemos olvidar que Samsung es responsable de sus propios sensores fotográficos, los Isocell, y gracias a eso podría tener entre manos un salto de calidad mayor que el esperado. Aunque como de costumbre, esperaremos a que se acerque más la fecha de presentación para conocer más al respecto. Aún no hemos acabado octubre y ya tenemos filtraciones sobre el S8 que nos hacen pensar que estamos en diciembre.

Un Galaxy S7 más inteligente gracias a VIV

El otro punto, también comentado por Samsung, es el relativo a la inteligencia artificial del propio terminal. Caminamos hacia un futuro en el que el hardware podría ser lo menos importante en un teléfono móvil. Google con su Assistant parece haber marcado el camino a seguir en cuanto a evolución. Una inteligencia artificial en el centro de todo y con hardware a su servicio, un hardware fácilmente intercambiable.

La propuesta de Samsung en este sentido podría venir de la mano de Viv, una compañía especializada en inteligencia artificial recientemente comprada por los coreanos y que se integraría en el software del Samsung Galaxy S8. Eso coincidiría a la perfección con la intención de Samsung de ofrecer un S8 más inteligente. Sólo restará ver si en Seúl deciden antropomorfizar su asistente dándole un nombre como Siri o Cortana, o si prefieren algo más aséptico e impersonal como el Assistant de Google.

Si las filtraciones no fallan, estamos a tres meses de que el Samsung Galaxy S8 vea la luz y, por ahora, todo lo que vamos sabiendo sobre él captura nuestra atención. Todo hace indicar que el futuro S8 podría ser aún más redondo que la familia S7 y eso supondrá un refuerzo para un fabricante que lo ha pasado mal con el Note 7. Le vendrá bien, pues el iPhone 7 empuja como nunca y en el retrovisor ya ven la propuesta de su antiguo amigo y vecino, Google.

Vía | Techtimes
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