La carrera se ha relanzado, como cada vez que hay actualización. Una vez presentado Android 2.3 Gingerbread, los usuarios han empezado a hacer ruido sobre sus terminales y los fabricantes a responder cuáles actualizarán y cuándo. Samsung y LG han sido los primeros en declarar que habrá Gingerbread para sus buques insignia actuales.
Samsung lo ha confirmado por Twitter después de dar largas comentando que tendrían que estudiariar las posibilidades de actualizar pues dependían de la cooperación entre los que hacen el hardware y los que hacen las licencias de software. En la sucursal de la India han ido al grano con un par de tweets como el que veis en la imagen: Gingerbread estará disponible para Galaxy S. Imaginamos que se refieren a la familia completa, aunque a priori en España nos interesa el S original, el i9000, que se acaba de actualizar a Android 2.2.
Por su parte, LG había dado lugar a la desesperanza comentando vía Facebook que no actualizarían los Optimus porque Gingerbread exige un procesador de 1 GHz, lo cual es falso (no hay mínimo). Finalmente se han retractado y han anunciado en una nota de prensa que actualizarán a Gingerbread todos los Optimus One que actualmente estén en Froyo, como el superventas LG Optimus One.
Y qué hay de HTC
Los taiwaneses se han limitado a decir que con total seguridad tendrán terminales corriendo Gingerbread, sólo que todavía no han planificado las fechas de las actualizaciones (ni de nuevos smartphones). Damos por hecho que sí probarán el jengibre sus estrellas de estas Navidades, Desire HD y Desire Z, y nos caben pocas dudas de que también lo hará el Desire original.
Por cierto, HTC liberó ayer la actualización a Froyo para los HTC Legend del mercado libre, como lo hiciera Vodafone hace un mes con su propio firmware. No es Android 2.3, pero las mejoras de rendimiento y funciones como el tethering por WiFi conformarán por ahora a los poseedores del HTC de aluminio.
Vía | intomobile, LG, fonehome