Estamos viviendo los días más fríos del año. Como es obvio, debemos protegernos a nosotros mismos resguardándonos siempre que sea posible y abrigándonos mucho en el exterior. Ahora bien, también nuestro móvil puede sufrir con el frío. Sí, de la misma forma que las altas temperaturas les afectan, también las bajas pueden causar estragos.
Rizando el rizo, puede que en alguna ocasión hayas escuchado, leído o simplemente pensado si unas temperaturas gélidas pueden o no afectar a tu conexión a Internet. Y aquí podemos decir que sí y que no. Como casi todo en la vida, depende. Así pues, ahondemos un poco más en el asunto.
En sí mismo, el frío no empeora la conexión a Internet
Las bajas temperaturas como tal no suponen un obstáculo para la recepción de Internet en móviles y otros dispositivos. Sin embargo, si estas bajas temperaturas van acompañadas de elementos como fuertes vientos, lluvias y nevadas. Y que además sean fuertes y creen capas de agua y no simples lloviznas.
Y es que con estos elementos puede suceder algo parecido a lo que ocurre con obstáculos físicos como metales , maderas, azulejos o cementos gruesos. Aunque si tenemos en cuenta que estas situaciones solo se producen en exteriores, solo afectaría a tu conexión si es mediante datos móviles cuando estás en la calle.
Sí, la cosa cambia cuando estás en casa conectado a Internet mediante WiFi. Aquí la conexión depende de dónde y cómo esté colocado el router. Por norma general, si las antenas están bien orientadas, no hay elementos físicos que sirvan como obstáculos y la distancia no es muy grande, habrá buena conexión.
Otra cosa sería si en tu casa hace mucho frío, dado que el router podría dañarse de la misma forma que pueden producirse daños en el móvil y otros aparatos electrónicos. El frío y calor extremo son enemigos de la electrónica y en base a estudios y recomendaciones de muchos fabricantes, lo ideal es mantenerlos siempre en estancias que estén entre 5ºC y 35ºC y sin excesiva humedad.
Por tanto, ya a modo de conclusión, podemos ver que el frío como tal no es un obstáculo para la conexión a Internet, aunque sí un enemigo para tu móvil. Por muy buena conexión que puedas tener y pese a que parezca que su funcionamiento es el adecuado, lo mejor será reducir al máximo su exposición a bajas temperaturas si no queremos que se estropeen sus componentes.
Imagen de portada | Álvaro García M. con Midjourney