Cómo compartir la clave Wi-Fi entre dispositivos Apple con un sólo click en pantalla

Puede que en alguna ocasión, cuando un amigo o familiar ha llegado a nuestra casa (o somos nosotros los que vamos de visita), una de las cosas que hacemos es preguntar por la clave de la red Wi-Fi, del mismo modo casi que cuando vamos a un hotel. Y eso es algo que en iOS se puede hacer con un sólo click en pantalla.

Es una pregunta que hacemos más tarde o más temprano según el grado de frikismo que tengamos. Y si usamos iOS en una versión reciente puede que sea un paso que ni siquiera tenemos que dar, puesto que desde hace un tiempo el sistema operativo de Apple para móviles permite compartir la clave Wi-Fi sí cumplimos con una serie de requisitos.

 La clave Wi-Fi a un click

Compartir la contraseña de la red Wi-Fi entre dispositivos Apple (valen iPhone, iPad y equipos portátiles y de sobremesa) es muy fácil. Se acabó el usar códigos de barras, el botón WPS del router o tener que hacer una foto a la pegatina del router y enviarla por Telegram o WhatsApp.

Para poder compartir tu contraseña de Wi-Fi de forma sencilla entre dispositivos con iOS, esto es lo que tienes que hacer. En primer lugar contar en ambos dispositivos con la versión más reciente de iOS o iPadOS o macOS High Sierra o posterior y cómo es lógico, con los dos dispositivos con la conexión Wi-Fi y el Bluetooth activados. Además, si alguno de los dos teléfonos tiene activado "Compartir Internet" es necesario desactivarlo.

Con el dispositivo con acceso a la red Wi-Fi ya conectado, es necesario que el usuario que quiere la clave Wi-Fi intente conectarse a la misma red a la que está "enganchado" el otro teléfono.

Entonces, con el teléfono desbloqueado, aparecerá en pantalla un cuadro que nos pregunta si queremos compartir la clave Wi-Fi. basta con tocar el botón "Compartir contraseña" y de esa forma el otro usuario podrá acceder a la red Wi-Fi al dispositivo que no tenía acceso.

De esta forma nos ahorramos los engorrosos pasos, habituales en estos casos y de paso logramos dos objetivos: esa persona nunca podrá ver la clave Wi-Fi que se le ha facilitado automáticamente y por otro lado, si es de visitas frecuentes, contará con acceso siempre que llegue a casa.