Sabemos de sobra que tener el router encendido es fundamental para tener conexión a Internet vía WiFi en nuestros móviles, ordenadores, tablets y otros accesorios inteligentes. Sin embargo, quizás puedas tener dudas acerca de si conviene o no apagarlo y, en caso de que sea conveniente, cuándo hacerlo.
Pues bien, sin que haya realmente un tiempo establecido para ello, sí que conviene reiniciarlo cada cierto tiempo, proceso en el cual el router está apagado durante unos segundos. Si así lo prefieres, puedes hacer que se reinicie por las noches y ahorrarte todo el proceso. Ahora bien, a continuación vemos cuáles son esas situaciones en las que conviene hacerlo.
Apagar el router tiene sus ventajas, aunque también inconvenientes
Como ya te adelantábamos, no existe un tiempo establecido para ello, pero si unas situaciones en las que es conveniente que apaguemos el router. Aquí las principales:
- Cuando detectes problemas con la conexión. Aquí entran todo tipo de problemas con el WiFi como la conexión lenta o que sea intermitente.
- Cuando quieras cambiar tu IP dinámica. El apagado y encendido posterior del router sigue siendo una de las mejores formas de cambiar la IP, por lo que deberás apagarlo cuando desees hacerlo.
- Cuando vayas a estar mucho tiempo fuera. De esta forma ahorrarás algo de energía y evitarás que puedan entrar intrusos en tu red. No obstante, debes tener en cuenta que si tienes accesorios domóticos de seguridad como cámaras, probablemente no funcionen sin WiFi o no al menos como para que puedas consultar las imágenes a distancia.
- Para actualizar el router. Puede que jamás hayas tenido que actualizar tu router, dado que suele ser un proceso automático que no suele requerir de tu intervención. Sin embargo, en algunos casos sí que requiere de una acción, que no es otra que la de apagar el dispositivo durante unos segundos para que al encenderlo se apliquen los cambios.
- Cuando cambias alguna configuración. Muy al hilo del anterior punto, y aunque no siempre hace falta, cuando se cambia el nombre o la contraseña del WiFi puede llegar a ser necesario que se reinicie el dispositivo para que todos los cambios queden aplicados correctamente.
- Para solucionar otros fallos menores. Si bien son los problemas de conexión los más habituales, puede haber algunos fallos en el router más pequeños que se solucionan con un simple reinicio.
Así mismo, y de igual forma que es bueno apagar el móvil de vez en cuando, también podemos aplicarlo aquí. Y es que puede ser interesante reiniciar el router de vez en cuando para evitar errores futuros y así de paso reiniciar todos sus procesos internos. Puede que incluso solucione algún problema que ni siquiera estabas notando.
Por qué de forma general no es necesario apagar el router
Siguiendo el hilo del anterior párrafo, tampoco es necesario obsesionarse con apagar el router con cierta frecuencia. Y es que si no experimentas problemas no es algo que sea obligatorio, aunque convenga hacerlo al menos una vez al mes (como aproximación; insistimos en no obsesionarse).
Y es que apagar el router muchas veces no es malo como tal, pero sí muy tedioso. En el tiempo en que está apagado todos tus dispositivos perderán la conexión WiFi, algo que si bien podría no ser problemático de primeras, puede que arruine alguna descarga en proceso, parte de una copia de seguridad en la nube o de sincronización de datos.
Esto último es especialmente destacable en los móviles, incluso aunque se tenga una tarifa de datos ilimitados. Y es que hay algunas aplicaciones que precisan de conexión WiFi para la sincronización de datos, tanto por estabilidad de la conexión como por velocidad, sin tener en cuenta si los datos móviles pueden llegar a ser más adecuados.
Acerca del ahorro de energía al apagar el router
Sí, apagar el router sirve para ahorrar dinero en la factura de la luz, aunque tampoco era muy complicado de prever teniendo en cuenta que al final cualquier aparato conectado a la corriente consume energía. La gran duda es saber si mucha o poca.
Tal y como demostraron nuestros compañeros de Xataka Home en un experimento sobre ahorro de energía apagando dispositivos, el router encendido consume alrededor de 50 euros anuales sobre el total de la factura. A bote pronto parece un consumo elevado, pero realmente no es tanto como cabría esperar.
Y es que de media son unos 0,42 kWh que se traducirían en unos 15 céntimos diarios, que al final suponen un consumo mucho menor que el de otros electrodomésticos del hogar. Y salvo que te vayas a ir fuera durante un largo periodo de tiempo como comentábamos en un punto anterior, no merece la pena hacerlo.
Encenderlo solo cuando vamos a usarlo no es tampoco una buena idea. Entre las razones que avalan esta no recomendación nos encontramos primeramente con que estar encendiendo y apagando el router puede acabar consumiendo más. De hecho hay un mayor pico de consumo cuando se enciende y, de ser continuado, esos 50 euros al año podrían aumentar.
Por otro lado, no obviamos todo lo comentado anteriormente en relación a los problemas de perder la conexión en los dispositivos cuando están realizando procesos en los que hace falta conexión WiFi. Así que, si el ahorro de dinero es tu pretensión para apagar el router, ya avisamos de que no notarás mucho cambio en tu factura.
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