Si usas WhatsApp a diario es muy probable que alguna vez te hayas chocado de frente con problemas para descargar imágenes, vídeos o audios de los chats. No es que esto sea lo más habitual, pero es un "fallo" frecuente. Y lo entrecomillamos porque, salvo raras excepciones, no es un fallo realmente, sino más bien un problema con tu dispositivo.
Fundamentalmente, hay dos posibles causas para esta problemática: la conexión a Internet y el almacenamiento. En este post te explicaremos cómo puedes revisar cuál de las dos causas es y, una vez localizado, cómo arreglarlo. También incluiremos una solución que, por lo drástica que es, te recomendamos ejecutarla solamente si no lograste solventarlo con lo anterior.
Revisiones para descartar fallos de Internet
Al igual que te será imposible enviar y recibir mensajes de texto sin Internet, tampoco podrás recibir contenido multimedia. Incluso aunque lo hayas recibido con anterioridad, es posible que se quede con una flechita como indicador de que no se ha descargado.
Si procedes a darle a su respectivo icono de descarga y nunca se descarga o aparece un mensaje de error, probablemente se deba a un problema con tu conexión. Lo primero y más evidente que deberás hacer es observar si estás conectado, ya sea mediante WiFi o datos móviles. No obstante, tener conexión no es sinónimo de evitar fallos y el Internet puede seguir siendo la causa.
Por ello, es conveniente que realices un test de velocidad (sirve con la propia herramienta que da el buscador de Google). Puede que simplemente tengas una conexión lenta y por eso la descarga esté durando mucho o incluso se llegue a detener. De igual forma, también puede ser debido a cortes en la conexión, por lo que si experimentas más fallos además del de WhatsApp, sería conveniente que contactes con tu compañía para verificar si hay una incidencia en la red.
Ten en cuenta que también puede que no se descarguen los archivos debido a la configuración que tienes puesta y especialmente si estás conectado con datos móviles. Por ello es conveniente que revises en los ajustes del móvil, que vayas al apartado de "Datos móviles" y mires si WhatsApp tiene alguna restricción.
De igual forma, en la propia configuración de la app deberás comprobar si en el apartado de almacenamiento está habilitada la descarga de archivos. Hay tres opciones: no permitirlo nunca, permitirlo solo con WiFi o permitirlo tanto con WiFi como datos móviles.
No tener espacio en la memoria es una causa más que justificada
Incluso si tienes algo de espacio libre en la memoria interna del móvil, es probable que WhatsApp impida automáticamente la descarga de archivos. Y esto es algo evidente, ya que el móvil no tiene cabida para más datos.
Para ello debes revisar cuánto espacio libre te queda, una información que en el caso de móviles Android suele aparecer en Acerca del teléfono (también puedes localizarlo usando el buscador), mientras que en los iPhone se encuentra en Ajustes > General > Almacenamiento del iPhone.
Si compruebas que tu memoria está al límite, hay varias formas de liberar espacio del móvil, aunque es la propia WhatsApp la que más espacio nos puede ahorrar. ¿Y cómo? Pues básicamente recurriendo a eliminar archivos que anteriormente has recibido y enviado y que están disponibles desde las opciones de almacenamiento dentro de la app, ubicadas dentro de Configuración/Ajustes.
Solución a la desesperada: elimina la app
Si tras haber seguido consejos como los anteriores no lograste resolver el problema, es ya posible que sea debido a un fallo interno de la app o un bug de software. El segundo caso se podría resolver actualizando a la última versión de Android/iOS disponible para tu móvil e incluso restaurándolo. No obstante, no es lo más óptimo siempre.
En la mayoría de casos basta con que borres WhatsApp del móvil y la vuelvas a descargar, de forma que se eliminen todos los ficheros internos de la app y con ello los posibles archivos corruptos que estaban generando el problema. Tras ello no deberías tener ya problemas para la descarga de contenido en tus chats. Aunque, eso sí, lo más aconsejable es no cargar ninguna copia de seguridad para que sea una instalación "más limpia".
