Tenía problemas con mi WiFi y también tenía un móvil viejo. La solución fue juntar ambos

Los móviles viejos no dejan de ser útiles para el día a día por más que se queden algo obsoletos en software: siempre hay maneras de seguir aprovechándolos. Una de mis preferidas es la de extender el WiFi de cualquier red: si tienes un móvil viejo puedes ampliar la cobertura de tu router sin gastar un céntimo. Me ha salvado la vida en más de una ocasión.

Suele decirse que las mejores soluciones tienden a ser las más sencillas. Y esto ocurre también en el ámbito tecnológico: cuando surge un problema concreto vale la pena averiguar si podemos resolverlo con lo que tenemos por casa antes de comprar dispositivos nuevos. ¿Que el WiFi no llega a todos los rincones de la casa? Si es algo puntual, un viejo móvil sirve para salir del paso. Y es mejor de lo que parece.

¿Comprar un extensor de WiFi? Un viejo móvil es igual de válido

Cuando salgo de casa suelo llevar más de un teléfono, por lo general porque me encuentro en plena «operación review». Y el secundario me es útil para las situaciones en las que tengo baja cobertura WiFi, como cuando voy a los hoteles o estoy en un alojamiento rural. Entonces busco el punto donde mejor llega la conexión inalámbrica y dejo el móvil secundario como extensor de red.

Este truco no sólo es válido para los viajes, que también sirve en el domicilio habitual. Por ejemplo, a la habitación que tengo más alejada del router no siempre llega suficiente cobertura; por lo que, si he de conectarme desde allí (suele ser el lugar más tranquilo para videoconferencias), extiendo la red utilizando un smartphone para así garantizarme una calidad decente durante la conexión. Es válido tanto para móviles Android como para iPhone. Y no hace falta que tengan una SIM insertada.

¿Cómo utilizar ese móvil viejo como un práctico extensor de red WiFi? Fácil:

• Busca el punto con mejor cobertura que quede cercano al área que quieras cubrir con el WiFi del móvil.
• Coloca el viejo móvil en ese punto. Si vas a extender la red de forma puntual no necesitas un enchufe. En caso contrario, debes conectar el teléfono (o usar una powerbank, por ejemplo; que deberás ir recargando).
• Conecta el teléfono a tu red WiFi, aquella que desees extender.
• Configura el punto de acceso WiFi para compartir Internet en el segundo teléfono con un nombre de red (SSID) diferente de la WiFi de tu router.
• Activa ese punto de acceso y listo: ya tienes cobertura en esa zona de la casa.

El truco de extender la WiFi con un móvil viejo me ha solucionado más de un problema de cobertura. Sin gastar un céntimo, con muy buena calidad en las conexiones y sin tener que instalar apps: tanto iOS como Android ofrecen la función de compartir WiFi desde otra WiFi a nivel nativo.

Imagen de portada | Midjourney editada

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