En ocasiones los operadores móviles parecen cambiarse de sector o mezclar su principal negocio con el otras empresas, algo que ocurre con Vodafone Wallet, la reciente apuesta que la compañía de origen británico ha lanzado para que sus clientes dejen sus tarjetas bancarias en casa y paguen con el móvil.
Vodafone Wallet supone una apuesta por la integración de servicios bancarios y de telecomunicaciones y puede resultar atractivo para muchos, por ejemplo para aquellos que quieran controlar gastos ya que se trata de una tarjeta prepago, pero también puede despertar recelos en otros tanto. Es por ello que aquí os vamos a contar nuestra experiencia probando Vodafone Wallet.
¿Qué es Vodafone Wallet?
Empecemos por el principio, haciendo un breve repaso en que es Vodafone Wallet y que necesitamos para hacer uso de este servicio. Wallet no es más que una aplicación en la que que contamos con una tarjeta bancaria prepago tan válida como una de plástico de toda la vida, tanto para pagar en tiendas físicas como en compras online. En un futuro en Wallet se podrán integrar tanto otras tarjetas bancarias, como tarjetas de fidelización o abonos de transporte.
Para hacer uso de este servicio lo primero, obviamente es ser cliente de Vodafone, contar con un teléfono NFC compatible, actualmente lo son los HTC One, Samsung Galaxy S4, Sony Xperia Z, Samsung Galaxy S III, Samsung Galaxy S4 Mini, Samsung Galaxy S III Mini, Samsung Galaxy S 4G+ y LG Optimus G2, o adherir una pegatina NFC a nuestro móvil, una SIM NFC y la aplicación Vodafone Wallet, que de momento solo está disponible para Android aunque se espera que no tarde en llegar a iOS, Windows Phone y BlackBerry.
Una vez contamos con todo lo anterior lo siguiente es solicitar la tarjeta Vodafone SmartPass desde la propia aplicación. Además en un plazo aproximado de siete días el usuario recibe en su dirección una tarjeta física con la que puede pagar en comercios sin datáfonos contacless o para sacar efectivo en cajeros.
Experiencia de uso
Una vez estamos ya registrados y contamos con nuestra tarjeta prepago podemos comenzar a pagar con nuestro móvil en comercios, pero es aquí donde nos encontramos con el primer problema. A pesar de que Vodafone asegura que ya hay más de 600.000 datáfonos compatibles con el pago contacless fuera de grandes ciudades son difíciles de encontrar, algo que no resulta un problema si contamos con la tarjeta de plástico que también ofrece el operador.
El uso del móvil para pagar en terminales compatibles es extremadamente sencillo, y es que solo tenemos que acercar el smartphone al datáfono y mantener unos escasos segundos pegado para que se ejecute la transacción, pudiendo incluso pagar con el teléfono aunque este esté apagado, problema resuelto si nos quedamos sin batería, mientras tengamos la aplicación habilitada.
Seguramente a estas alturas muchos estarán preocupados por la seguridad y en este aspecto Vodafone ha configurado la aplicación para que por defecto se pida el PIN de la tarjeta para compras a partir de 20 euros, para las inferiores basta con acercar el teléfono, aunque el usuario también puede optar por cambiar la configuración para que se tenga que introducir el PIN en todas las compras.
En cuanto al seguimiento de nuestras compras y las recargas todo resulta muy sencillo, y es que desde la aplicación podemos acceder al registro de movimientos de saldo de la tarjeta y realizar recargas, ya sea mediante otra tarjeta, con disponibilidad casi inmediata del saldo recargado, o por transferencia bancaria, caso en el que tendremos que esperar varios días para disponer del saldo.
Pero nos queda por mencionar una curiosa función de Vodafone Wallet fuera aparte de poder pagar el establecimiento, y es que con este servicio sus usuarios también pueden hacer transferencias entre sí, para lo que basta con introducir el número de teléfono del otro usuario, que también tiene que usar Wallet, y seleccionar la cantidad a transferir.
Muy útil para ciertos perfiles pero a falta de más datáfonos compatibles
Nuestra experiencia durante los días que pudimos hacer uso de Vodafone Wallet fue totalmente positiva, aunque a lo mejor para alguien que siempre lleve la cartera encima con sus tarjetas bancarias no tiene demasiada utilidad, aunque si podemos encontrar perfiles de usuarios para los que una Vodafone SmartPass puede ser muy útil.
Personalmente encuentro la utilidad por ejemplo como tarjeta bancaria para menores de edad, pudiendo los padres realizar recargar periódicas para tener controlados los gastos de sus hijos o en el mismo sentido también lo podrían usar empresas con sus empleados, por ejemplo para pagarles las dietas u otros conceptos.
Ahora el único punto negativo que le he encontrado durante estas pruebas a esto de usar el móvil como método de pago es la escasez de datáfonos compatibles fuera de grandes ciudades, personalmente lo he probado en Madrid y Bilbao y en la primera no era complicado encontrarlos pero en la segunda si, lo que nos obliga a llevar la tarjeta de plástico siempre encima. Ahora este punto seguramente se vaya solucionando con el paso del tiempo, con la renovación de los datáfonos que las entidades bancarias ofrecen a los comercios.
Más información | Vodafone Wallet
Ver 11 comentarios