Como suele ocurrir en la recta final de cada año, Apple renovó su catálogo móvil con los nuevos iPhone y también con su último dispositivo de muñeca, el Apple Watch Series 7. Éste tiene mayor pantalla que el Apple Watch Series 6, su carga es más rápida y ofrece un mejor rendimiento. ¿Merece la pena el cambio con tan "escuetas" novedades? Toca averiguarlo.
Los relojes inteligentes son uno de mis productos tecnológicos preferidos: tengo, y he tenido, una buena cantidad de ellos. Samsung, Mobvoi, Fitbit, Amazfit, Huawei y Apple, éstas son las marcas que han engalanado mi muñeca durante los últimos años. Por equilibrio de funciones, y calidad de los registros deportivos, el Apple Watch es uno de los relojes que más servicio me ha prestado. Dado que llevaba tres años con el Series 4, me decidí a dar el salto al Series 7. Veamos cómo está siendo mi experiencia.
Ficha técnica del Apple Watch Series 7
APPLE WATCH SERIES 7 |
|
---|---|
CAJA |
45 mm |
PANTALLA |
Retina LTPO OLED |
PROCESADOR |
Apple S7 |
Almacenamiento |
32 GB |
CONECTIVIDAD |
Wi-Fi (802.11b/g/n 2.4GHz) |
SENSORES |
SpO2 |
RESISTENCIA AL AGUA |
50 metros |
BATERÍA |
Hasta 18 horas (según Apple) |
OTROS |
Función llamada de emergencia, detección de caídas, UWB |
DIMENSIONES Y PESO |
45 x 38 x 10,7 mm |
PRECIO |
Apple Watch Series 7 (GPS) - Caja de Aluminio en Azul de 45 mm - Correa Deportiva en Color Abismo - Talla única
Diseño: el mismo de siempre, para bien y para mal
La evolución de los relojes de Apple ha sido constante, aunque siempre sobre la misma base: esfera cuadrada, cristal recubriendo la pantalla con bordes curvados, caja de metal en armonía con la curva del vidrio y dos botones en el lateral del reloj, uno de ellos en forma de corona giratoria. Esto se mantiene constante en el Apple Watch Series 7.
Hay que tener la mirada muy fina, y conocer al detalle cada mínima diferencia en el exterior del Apple Watch, para identificar a este Series 7 del resto de modelos anteriores. Eso sí, nada más encenderlo salta la más clara de todas: el panel es enorme, sorprende todo lo que puede ofrecer la pantalla.
El modelo que adquirí yo, y sobre el que versa este análisis, es el de 45 mm en color azul con la correa Loop trenzada en ese mismo color. El aspecto exterior es exquisito, la tonalidad encaja muy bien con el estilo del Apple Watch 7. Es algo grueso (bastante) y también grande, aunque no exagerado. En una muñeca de tamaño generoso su apariencia no resulta exagerada.
La construcción es de alta calidad: vidrio endurecido para el frontal, caja de aluminio y cerámica para la cara interna, la que incluye los sensores. El reloj gana la certificación IP6X contra el polvo y mantiene la resistencia al agua WR50 de anteriores modelos. Apple asegura que ha mejorado la resistencia de los materiales, no es algo que haya podido probar: en las semanas que llevo con el reloj aún no tiene arañazos (y espero que siga así).
La corona mantiene la excelente sensación háptica que Apple regala con los Watch: su tacto es preciso, la vibración acompaña de manera sutil y es muy práctica para los menús. El panel táctil responde a la perfección. Y las correas encajan en los bordes manteniendo la compatibilidad con modelos anteriores. Quienes tengan correas de antiguos Apple Watch pueden seguir utilizándolas con el Series 7.
La iteración no supone un cambio de diseño, el aspecto del Apple Watch Series 7 sigue siendo casi idéntico. Es una buena noticia para quienes están encantados con el aspecto externo del reloj y no quieren arriesgar al ponérselo, también evita que se diferencie el modelo nuevo de los antiguos (perfecto para quienes cuidan la apariencia). Aunque, tras la trayectoria holgada del Apple Watch, creo que tocaba un cambio de aspecto notorio. Aun así, el diseño me sigue pareciendo atractivo pese a que no arriesgue (y quizá por eso).
Pantalla: su principal apuesta es el tamaño
Encender el Series 7 por primera vez tras estar acostumbrado a los modelos anteriores genera una sorpresa cuando la pantalla se ilumina: ésta es enorme y alcanza casi hasta los bordes del reloj. La visibilidad mejora en gran medida, los mensajes se leen a la perfección y hasta los textos más pequeños de las aplicaciones ven maximizada su lectura. A nivel de cambios es el más notorio.
Más allá del tamaño, el Apple Watch Series 7 mantiene la excelente calidad del panel, representación de color, saturación y nitidez que en modelos anteriores: visualizar el reloj es una delicia. Y la respuesta háptica ha mejorado ligeramente: el sistema de vibración transmite perfectamente las reacciones físicas de la interfaz.
Buena visibilidad en exteriores (hacer deporte bajo el sol no acarrea complicaciones de legibilidad), el brillo mínimo no molesta en plena noche, Apple mantiene la opción de la pantalla siempre encendida (a fuerza de reducir la autonomía de manera considerable), permite mejorar la lectura ampliando el texto o añadiendo negrita y el gesto de levantar la mueca para encender la pantalla acostumbra a ser eficaz.
La calidad del panel es excelente, no hay pegas. Aunque eso sí, tampoco es que el mayor tamaño de la pantalla justifique el salto desde las generaciones anteriores: es un elemento cosmético al que la vista se acostumbra rápido. Lo que mejora de manera ostensible es la relación entre el tamaño del Apple Watch 7 y la diagonal de pantalla: el reloj sigue siendo muy grande, pero el frontal se aprovecha en mayor medida. Esto es más notorio en el modelo más pequeño, el de 41 mm.
Rendimiento impecable, fluidez constante
El nuevo reloj de Apple estrena procesador de doble núcleo indicado para smartwatches: el Apple S7. Éste mejora el rendimiento sobre el papel con respecto a anteriores modelos (es un 20 % más rápido que el SoC del Apple Watch SE, siempre según Apple) y reduce el gasto energético. En la práctica no se nota una mejora clara en rapidez y fluidez de la interfaz, WatchOS se caracteriza por ser muy veloz. La autonomía sí aumenta, ya lo detallaré en el apartado pertinente.
Tanto la interfaz como las aplicaciones se ven muy rápidas en pantalla y con ese extra de tamaño que logra mayor visibilidad a cualquier aspecto del reloj. Abrir la app de entrenos y seleccionar un ejercicio, deslizar el dock, las notificaciones o entrar en el mosaico de aplicaciones: cualquier gesto es veloz. Incluso los propios gestos, como levantar la muñeca para activar la pantalla. Éste a veces falla, pero no suele ser costumbre.
No he apreciado consumos extraños motivados por el sistema, tampoco el Apple Watch Series 7 se calienta: en todo momento lo he notado tibio, incluso durante largas sesiones utilizando el GPS del reloj. El hardware está a la altura de lo esperado, aunque también lo estaba en generaciones anteriores, el nuevo modelo tampoco implica una mejora revolucionaria.
Salud y deporte: sin novedades, aunque con el seguimiento fiable de siempre
No hay grandes novedades a nivel de hardware, al menos visibles. Y esto afecta al seguimiento de la actividad, al registro deportivo y al de salud: en Apple Watch Series 7 mantiene el buen hacer de sus predecesores sin añadir novedades. Esta ausencia de cambios resta algo de atractivo para quien quiera renovar; sin que por ello el reloj deje de ser uno de los más completos en el segmento de los generalistas.
El Apple Watch nunca ha sido un smartwatch especializado en deporte: su idea es la de ofrecer un rendimiento general alto sin restringirse a un punto concreto. Aun así, el Series 7 mide muy bien las prácticas deportivas, el seguimiento del GPS en exteriores es acertado y hasta la medición de altas pulsaciones puede considerase como fiable.
Apple incluye seguimiento constante de los latidos, ofrece registro de saturación de oxígeno en sangre (puntual y de forma automática), mantiene los electrocardiogramas (ECG), mide la calidad del sueño y su duración, aplica el seguimiento constante de la actividad reflejándola en los famosos tres aros (es uno de los detalles que más me gustan), puede medir el ruido externo (gasta mucha batería), ofrece técnicas de relajación y sus recordatorios (actividad, ejercicio, respiración...) incentivan en gran medida levantarse de la silla. Apple ha logrado un gran instrumento contra el sedentarismo.
Mi rutina diaria de entrenamiento transcurre entre una sesión de running en exteriores (mínimo de cinco kilómetros), unos 40 minutos de HIIT, suelo dedicarle el fin de semana a las rutas en bici de montaña (20 kilómetros de media en cada sesión) y, con relativa frecuencia, hago paseos de varios kilómetros. Medir todo ese ejercicio con el Apple Watch Series 7 es sencillo y, sobre todo, bastante preciso.
El seguimiento del GPS en exteriores es muy correcto, diría que el margen de error se sitúa en torno a un 2 % (y menos) en prácticas de larga duración. Durante mis sesiones de running el Apple Watch Series 7 marcó los puntos del recorrido con suficiente precisión. Además, el marcado del posicionamiento se produce a intervalos muy reducidos; lo que termina traspasando rutas al mapa sin apenas desviaciones, incluso durante los entrenamientos en recta.
Con la medición del ritmo cardíaco sí he tenido algún encontronazo: a bajas pulsaciones no hay problema de fiabilidad, a medias tampoco suele haberlos. Ha perdido mediciones cuando el ritmo cardíaco ha superado los 150 latidos por minuto: es relativamente habitual tener franjas en blanco durante los registros, incluso ajustando bien el reloj a la muñeca. Con la actualización a WatchOS 8.1 la fiabilidad del registro cardíaco ha mejorado.
Batería: uno de los puntos fuertes del Apple Watch Series 7
Apple asegura que su nuevo smartwatch aguanta encendido 18 horas, igual que las generaciones anteriores. No obstante, y bajo mi propia experiencia, el Apple Watch Series 7 se mantiene en vida hasta los dos días con una carga. Incluso con los 90 minutos de entrenamiento, GPS incluido.
Siempre utilizo la función de apagado automático para la pantalla, no considero ni práctico ni energético tenerla encendida de manera constante. De activarse el always on se hace imprescindible recargar el reloj a diario. Prescindiendo de esta función no sólo se ahorra (mucha) batería, también vida de la pantalla OLED. Que no está de más.
La duración de la batería no es ni mucho menos óptima ya que, por más que haya que cargar el reloj cada dos días, sigue siendo una frecuencia exagerada para un reloj inteligente. Eso sí, el Apple Watch Series 7 mejora de manera notable dicha carga al acelerarla hasta un 33 %, siempre según Apple. Bajo mi experiencia, esa mejora en la carga rápida se nota: de 0 a 100 % tarda aproximadamente 1 hora y 13 minutos (tiempo tomado con un cargador rápido de iPad y con el puerto USB-C de un MacBook Pro).
El cable incluido con el reloj mantiene la base magnética y ofrece un conector USB C en el otro extremo. Como es habitual, no se incluye cargador con el Apple Watch Series 7.
Software: si algo funciona bien mejor no lo toques
Con la llegada de la nueva generación Apple renovó no sólo el hardware, también el software. Así nació WatchOS 8; con la versión que actualmente se encuentra en mi Watch Series 7, WatchOS 8.1.
El software incluido en nuestro protagonista no entraña misterios para cualquiera que ya haya utilizado un Apple Watch: interfaz adaptada a la perfección al uso táctil combinado con la corona giratoria, integrado con el resto de dispositivos de Apple, con todas las funciones de salud y deporte bien accesibles y la posibilidad de instalar aplicaciones para eu funcionen en el reloj de manera independiente.
La pantalla más grande facilita que la lectura de notificaciones sea mucho más cómoda. Y la comunicación se ve mejorada desde el reloj, incluso con fotos: adjuntarlas a los mensajes es muy sencillo con WatchOS 8. El sistema traslada al smartwatch los modos de concentración, se estrena la app "Mindfulness" para la relajación, Apple completa las respuestas por voz y la escritura a mano con un nuevo teclado, la medición de sueño registra la frecuencia respiratoria y los entrenos pueden detectar las caídas para así activar el modo de emergencia.
Como es habitual con cada nuevo modelo de reloj, Apple estrena watchfaces con el Watch Series 7. Bajo mi opinión, éste es el punto más débil de todo el reloj: las esferas incluidas no aprovechan las enormes posibilidades del reloj. A falta de que Apple libere finalmente el diseño para que podamos descargar nuevos watchfaces desde la App Store, sí se ha mejorado mínimamente la personalización: hay nuevas esferas de retrato con las que dar un toque único al Watch. Y no demasiado más: Apple prioriza los diseños artísticos a los más adecuados para un reloj.
Apple Watch Series 7, la opinión de Xataka Móvil
El Apple Watch no es el mejor reloj deportivo, tampoco el más completo en el campo de la actividad o el que mayor compatibilidad ofrece con los distintos teléfonos. Sí que es el más equilibrado a nivel genérico: notificaciones, medición de ejercicio, actividad, aplicaciones y software propio del fabricante. Esto tiene su contrapartida: además del alto precio, el Apple Watch Series 7 sólo puede usarse con un iPhone (mínimo iPhone 6S).
No supone un salto evolutivo notorio, por lo que no lo veo recomendable para alguien que tenga un Apple Watch Series 6 o Apple Watch SE (incluso un Series 5). Se agradece la carga rápida, también la mejora en autonomía con la pantalla siempre apagada. Y la pantalla se ve espectacular por más que la vista se acostumbre rápido: leer más fácilmente el contenido de las apps y de las notificaciones es una significativa mejora. Y sin perder la compatibilidad con correas anteriores.
El Apple Watch Series 7 es un reloj caro que limita su compatibilidad a un teléfono caro. Sus 429 euros de base (459 euros en el caso del que ocupa este análisis, el de 45 mm) hacen que recomendarlo sea complicado. Por mi experiencia, va genial para fomentar la actividad, medir el ejercicio a nivel amateur y reducir el uso del teléfono; usos que se pueden cubrir con propuestas mucho más económicas.
El Apple Watch Series 7 es un dispositivo que hace casi de todo a un nivel muy alto. Acostumbrarse al reloj es fácil, prescindir de él se hace muy difícil.
8.9
A favor
- La pantalla es superlativa, en dimensiones y calidad.
- La carga rápida complementa una duración aceptable de la batería.
- Preciso en registro deportivo, incluso con GPS.
En contra
- No aporta verdaderas novedades con respecto a la generación anterior.
- Las opciones de personalización de la pantalla son muy limitadas.
- Obligatorio tener un iPhone para poder usarlo.
Apple Watch Series 7 (GPS) - Caja de Aluminio en Azul de 45 mm - Correa Deportiva en Color Abismo - Talla única