A pesar de que muchos hacen más ruído que ellos, la compañía finlandesa Nokia sigue siendo la reina dentro de los fabricantes de teléfonos móviles.
Y en ese aumento de beneficios de este primero trimestre, cuyos resultados han transcendido hoy, no tienen mucho que ver los Nseries, sino la gama baja, de menos de 30 euros, de la compañía. El por qué está muy claro: los mercados emergentes.
En India, China y África, Nokia está viendo como crece de manera exponencial su negocio, y si bien no son terminales de un alto valor, el bajo coste de producción y el que se vendan tantas unidades ha hecho el resto. Las ganancias por cada acción se han doblado en este periodo respecto al mismo de 2006.
Si hablamos de cifras, en este trimestre Nokia ha vendido 112 millones de teléfonos, más que sus tres siguientes rivales juntos. Además, 8 millones de nuevos clientes se suman a la cuenta cada mes en India por ejemplo.
Y lo mejor es que planean crecer mucho más en lo que resta de ano, apoyado en esos mercados que descubren ahora los Nokia básicos por los que todos hemos pasado alguna vez.
Vía | Reuters.
