Reconozco que aunque desde hace tiempo aposté por los modelos "medios" (vamos, por los iPhone Pro que no son Max) y que la decisión a la hora de elegir un móvil está fuertemente marcada por el sistema operativo y la calidad de las cámaras, siempre me han gustado los móviles pequeños. Los he tenido y entre mis elecciones ha estado por supuesto el iPhone SE original de Apple.
Por ese motivo, nunca pierdo de vista aquellos terminales que podemos catalogarlos como compactos hoy en día. Además, es relativamente común que me pregunten por ellos, aunque no tengo claro que verdaderamente haya demanda por los móviles compactos o simplemente sea solo un sesgo de confirmación y no la realidad. Después de todo, Apple se cargó sus Mini porque no se vendían.
¿Por qué me gustan tanto los teléfonos pequeños? Lo puedo resumir en dos cosas: quiero la comodidad y ergonomía poderlo manejar con una mano y que ocupe y pese poco cuando lo llevo en el bolsillo (nunca llevo bolso y apuesto siempre por ir con lo mínimo imprescindible). Hay otro problema: a causa de mi uso intensivo, también necesito que sea potente. Vamos, quiero hardware de gama alta en frasco pequeño. Aquí la cosa se complica y cada vez más nos dirigimos a una misión (casi) imposible.
La percepción de 'móvil pequeño' ha ido variando con el tiempo
Os gustan grandes y lo entiendo. Un dispositivo mayor tiene espacio para añadir una batería de más capacidad, integrar más sensores y por supuesto, una pantalla de más pulgadas en la que disfrutar mejor del contenido. Cuanto más grande sea un teléfono, más cosas se pueden hacer en él (y para muestra, los plegables). Yo me quedé en navegar, algo de edición de textos e intercambio de correo de emergencia, muchísima fotografía y redes sociales. No necesito más: ni veo películas, ni trabajo con una hoja de cálculo con muchos datos ni juego en el móvil, ya tengo otros dispositivos desde donde ejecutar esas tareas.
Aunque también es de justicia reconocer que el 'pequeño' de ahora no es como el de antes y que al final la clave está en el aprovechamiento de las dimensiones: una pantalla de 4,7 pulgadas en un dispositivo de casi 14 centímetros (el iPhone SE 2022) es un hándicap brutal respecto al Samsung Galaxy S24 con 6,2 pulgadas y 14,7 cm o el Asus Zenfone 10, con 5,9 pulgadas y 14,6 centímetros. Resumiendo, que en la actualidad catalogaríamos como móvil pequeño a aquel cuya diagonal de pantalla ronda las 6 pulgadas.
Los pequeños de ahora son considerados como tal frente a modelos con paneles de 7 pulgadas, pero obviamente no es ni mucho menos la experiencia de ese Samsung Galaxy Ace o del iPhone 3GS: ambos con 3,5 pulgadas y poseídos por mí en algún momento de mi vida. Esas 3,5 pulgadas vistas desde ahora se sienten como una jaula, pero las seis pulgadas de diagonal me resultan suficientes. Asimismo, ese tamaño con las baterías de hoy me permiten una autonomía de un día con uso normal y en jornadas excepcionales donde estoy todo el día fuera, me llevo una batería externa: prefiero eso a llevar un dispositivo grande y pesado a diario.
El futuro pinta negro (pero tiene truco)
Dicho todo esto, el panorama es desolador. Al principio he mencionado prácticamente a los únicos candidatos a los que alguien podría aspirar si buscase un teléfono compacto y potente: el veterano y con aspecto anticuado iPhone SE 2022, el Samsung Galaxy S24 y el Asus Zenfone 10 como máximo exponente de compacidad dentro de la potencia. Limando un pelín los milímetros tenemos el iPhone 15 con 6,1 pulgadas y el Google Pixel 8 con 6,2 pulgadas para cerrar el grupo de elegidos.
Adiós al Asus Zenfone 11. Hay un problemilla más: acabamos de conocer al Asus Zenfone 11 Ultra, pero ni rastro del modelo sin apellido. Todo apunta a que la versión compacta parece haberse ido al limbo de otros como los iPhone Mini o el Sony Xperia XZ1 Compact. El camino del compacto parece estrecharse, dejando como principales candidatos a los futuros iPhone 16, Google Pixel 9 y Samsung Galaxy S25, sin olvidarnos de ese potencial iPhone SE 2024, que esperemos se materialice con un diseño verdaderamente renovado.
Hay otro as en la manga: los plegables, que parecen haber llegado para quedarse. La vía de escape si buscamos más alternativas son los plegable tipo conca como el Samsung Galaxy Z Flip 5, el Vivo X Flip, sus herederos y los que están por llegar. Eso sí, con los desafíos inherentes a ese diseño y el coste de ser todavía la novedad que me hacen ser todavía reacia a comprarme un plegable.
Portada | Iván Linares
En Xataka Móvil | Mejores móviles pequeños: cuál comprar y modelos recomendados
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Larry Capija
Lo patético es que siguen habiendo lloriqueos de que no hay compactos para los que la tienen chica (la mano).
xoxito
los teléfonos compactos no es que se dejarán de vender, es que se dejaron de fabricar y por pelotas te tienes que comprar uno grande si o si o las baterías fijas, etc, vamos a remolque de los fabricantes, hay mucha gente interesada en teléfonos compactos, pero los fabricantes sabrán porque no quieren hacerlos.
Piter_Parking
Créditos a Marques Brownlee. Menudo calco de su última publicación....
Herto90
Pues alternativas compactas y potentes hay alguna S24, iPhone 15, iPhone 15 pro, Xiaomi 14, pixel 8...
Lo dificil es encontrar un móvil gama media baja y compacto, ahí todos tienen 6,5" o más y no escatiman en marcos lo que lo hacen más grandes todavía. Y conozco a mucha gente que quiere un móvil compacto pero que no esta dispuesta a gastarse más de 500€ en un móvil.
gsm_atack
Es que en general no hay modelos compactos. Sobre el papel los plegables son una opción pero, los he visto en tienda y ya no me parecen tan compactos como esperaba.
tofol.perello
Xperia 5 V
Kolo Raro
Unihertz.
allfreedo
El año pasado me tocaba cambiar el iPhone, me tocaría el 14… pero aposté por el 13 mini. Este año toca volver a cambiar y la duda está entre el 16 (seguramente Pro)… o cambio de batería al 13 mini y aguantarlo otro año al menos.
No va a ser una decisión fácil.
liszt606
Es que con la alta potencia y componentes exigentes que montan los móviles de hoy en día (y con lo tragones que son iOS y Android actuales) no hay batería que resista en esos modelos mini
kokorikol
Tuve un Nexus 5. Para mí, un compacto ideal. Ahora tengo un S24. Es 1mm más ancho, 9 mm más largo, y casi 2mm más delgado. La diferencia de tamaño no es tanta. Pero tiene 31mm más de diagonal, y casi el doble de batería, que sin duda dura mucho más y carga mucho más rápido. Compactos hay. No muchos, pero hay. El problema es que son caros: por el Nexus 5 pagué 359 € en 2013 (430 € a día de hoy) y por el S24 he pagado 739€ (con regalos). Pero, claro, el S24 está a años luz de lo que me daba el Nexus 5. Así que no es que el S24 esté caro, sino que no hay compactos de gama media/baja a precios más asequibles