Google ha dejado el listón muy alto con sus nueva generación de teléfonos Pixel, y uno de los elementos que le dejan en tan magna posición es, sin lugar a dudas, su equipo fotográfico. Lejos de cámaras duales, el Pixel 2 es un teléfono que ha conseguido las valoraciones más altas en materia fotográfica, pasando por delante de rivales del tamaño del iPhone X.
No podemos negar que los resultados de la cámara del Pixel 2 son impresionantes tanto en foto como en vídeo, y precisamente el vídeo es uno de los puntos que ha mejorado considerablemente desde el anterior modelo, concretamente el sistema de estabilización, que si bien fue una de las pegas más mencionadas en el Pixel primigenio, ahora le suma puntos a la que dicen es la cámara móvil del momento.
Fusionando teconologías
Como decimos, el anterior modelo de Pixel contaba con un sistema de estabilización digital (EIS) que si bien respondía correctamente cuando sosteníamos el teléfono de manera fija, se comportaba de manera errática tan pronto como nos movíamos, ya que el sistema tendía a estabilizar el movimiento como si de vibraciones se tratase.
Google prometió arreglarlo, pero parece que eso directamente se ha traducido en un 'arreglarlo en el siguiente modelo'. De este modo, la nueva generación de Pixel llega de nuevo con este sistema EIS, pero combinado con un sistema de estabilización óptica (OIS). La fusión de ambas tecnologías da como resultado un sistema de estabilización de vídeo fusionado (Fused Video Stabilization), que Google ha explicado cómo funciona y por qué ofrece mejores resultados que los de sus competidores.
En este vídeo de muestra podemos ver que el clip de la izquierda ha sido grabado sin ninguno de los sistemas de estabilización activados, mientras que el de la derecha goza de estabilización por partida doble con EIS y OIS fusionándose. La estabilización óptica por hardware (OIS) ayuda a estabilizar sin que haya pérdida de resolución de la imagen, y al mismo tiempo, el sistema de estabilización electrónica reduce las vibraciones sobrantes que el OIS no ha sido capaz de estabilizar, para afianzar aún más la toma.
De este modo no tenemos los problemas de detección que encontrábamos en el primer Pixel, pues lo que hace ahora el sistema de estabilización electrónica es mejorar lo que hace el OIS de forma "física", por lo que ya no nos topamos con esas detecciones de movimientos erráticas y sí con una estabilización mejorada por partida doble.
Además, el sistema electrónico compara los datos de posición del OIS con los datos de posición del giroscopio incorporado del teléfono, para equilibrarlos y estabilizar aún más el video mientras graba. Mientras que todos los teléfono del mercado eligen entre estabilización de imagen óptica (OIS) o estabilización electrónica de imagen (EIS) el Google Pixel 2 es el único que se combina ambos métodos al mismo tiempo.
El algoritmo que se anticipa
Además de la combinación de ambos sistemas, Google utiliza en su EIS algo así como un algoritmo "anticipado" capaz de hacer predicciones gracias al aprendizaje automático, y que es capaz de adivinar hacia dónde podría moverse el teléfono a continuación, lo que permite corregir movimientos mejor y más rápidamente (incluso en efectos tan molestos y comunes como el del obturador rodante que podemos ver en el vídeo anterior).
Este método de algoritmos también es capaz de introducir movimientos virtuales para contrarrestar y disimular variaciones muy fuertes en la nitidez de la grabación, como por ejemplo, cuando movemos el teléfono de manera demasiado brusca.
No es perfecto pero sí es (por ahora) el mejor
¿Es perfecto este sistema de estabilización? No, y es probable que aún el EIS falle en ocasiones con sus predicciones, pero no cabe duda que la combinación de ambos sistemas de estabilización, más la implementación de la inteligencia artificial, es un combo que abre el camino hacia una nueva forma de ver la grabación de vídeo en el móvil y que muy probablemente, comencemos a ver en los próximos terminales de gama alta.
En Xataka Móvil | En busca del mejor smartphone fotográfico en la gama media: seis candidatos frente a frente
