MásMóvil nació en 2008 como OMV, pero con el paso de los años, un rápido crecimiento de líneas gracias a su apuesta low cost, y la compra de un buen puñado de operadoras, incluido Yoigo, que le convirtió en el cuarto operador con despliegue de red propia, y un actor incómodo para los operadores más asentados.
14 años después vemos lo poco que queda de lo que originalmente era MásMóvil, sobre todo desde que el Grupo fue adquirido por los fondos de capital riesgo KKR, Cinven y Providence en 2020, y podría decirse que estamos asistiendo a sus últimos pasos como proyecto de teleco europea tras su apuesta por Portugal cuando culminó la compra de Nowo en 2020.
Por un lado, a comienzos de año, Orange y MásMóvil anunciaron un acuerdo para fusionar sus negocios en España, que de ser ratificado por los reguladores europeos, podría culminar con una compra total por parte de Orange, una vez pasados tres años desde la fusión efectiva.
Por otro lado, MásMóvil está cerca de salir por completo de su breve experiencia portuguesa después de que este fin de semana haya anunciado que ha llegado a un acuerdo con Vodafone para comprar el 100% de Nowo, la marca con la que MásMóvil opera en el país luso.
Nowo es el cuarto operador convergente más grande de Portugal, con alrededor de 250 mil suscriptores de servicios móviles y 140 mil clientes de acceso fijo (TV de Pago y Banda Ancha) en aproximadamente 1 millón de hogares cubiertos por su infraestructura de comunicaciones.
Los argumentos esgrimidos para llevar a cabo el acuerdo, nos suenan a lo vivido recientemente en España.
La adquisición de la operación de Nowo por parte de Vodafone refuerza su competitividad en el mercado, dotándola de mayor escala y mayor cobertura, con beneficios para los clientes actuales y futuros, así como para el sector. También crea las condiciones para inversiones más eficientes en redes de conectividad de alta velocidad, así como en el desarrollo de productos y servicios innovadores.
Según fuentes del mercado, la transacción estaría valorada en torno a 150 millones y deberá esperar a la aprobación regulatoria necesaria, que se espera que pueda completarse durante la primera mitad de 2023.
Digi gana la partida low cost a MásMóvil
Portugal se había convertido en el punto de partida de la incipiente expansión internacional de MásMóvil pero ante la llegada de Digi a Portugal, con intenciones de invertir en el despliegue de red, y su reconocida apuesta por el bajo coste más estricto llevado a cabo en los territorios donde la operadora rumana tiene presencia, parece haber motivado a vender lo que quedaba de MásMóvil tras la joint venture española.
Con la salida de MásMóvil, la operadora rumana se garantiza el cuarto puesto en Portugal tras Meo (la antigua Portugal Telecom), Vodafone, y NOS. Un cuarto puesto muy deseado, sobre todo en un país con 10 millones de posibles suscriptores, y donde no quedaba demasiado margen para el quinto operador.
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