Hace apenas una semana, se filtraba la posibilidad de que Facebook fusionara sus plataformas WhatsApp, Instagram y Messenger, aunque quedaban en el aire los motivos reales de esta idea. Ahora Zuckerberg ha ido un paso más allá y ha asegurado durante la presentación de resultados de la compañía que estudian esa integración y que ve estas tres aplicaciones de forma global en el futuro y con un matiz importante: con mayor seguridad.
Lo cierto es que la integración sería a nivel de infraestructura y las tres aplicaciones seguirían existiendo de forma separada. Así, según Zuckerberg, la idea es unificar solo los chats para que la comunicación sea más fácil a través de las diferentes plataformas y sobre todo, más segura, para lo que incluiría el cifrado de extremo a extremo que ya existe en WhatsApp. Pero eso sí, no lo veremos hasta, al menos, 2020.
Cifrado de extremo a extremo
Según los resultados de Facebook, más de 2.600 millones de personas al mes usaron Facebook, WhatsApp, Instagram o Facebook Messenger en 2018. Con estas cifras en el horizonte, la nueva plataforma con WhatsApp, Instagram y Facebook Messenger integrados permitiría, por ejemplo, enviar un mensaje desde WhatsApp a Messenger o Instagram y viceversa con total facilidad, sin necesidad de cambiar de app para hacerlo.
Para hacer más segura esa nueva plataforma de mensajería, tomaría prestada una de las características principales de WhatsApp: el cifrado de extremo a extremo. Con él, los mensajes enviados quedarían completamente protegidos, solo accesibles para emisor y receptor sin posibilidad de que sea leído por un tercero, tal y como ocurre en WhatsApp.
Pero no será de forma inmediata. Según el propio Zuckerberg, el proyecto de integración de las plataformas de la compañía se encuentra en su primera fase de desarrollo y tendremos que esperar al menos hasta 2020 “o incluso más” para verlo hecho realidad.
Facebook ha presentado sus resultados abogando por la privacidad de sus usuarios en un momento especialmente delicado, sobre todo después de que ayer reconociera que pagó a jóvenes por instalar una VPN para monitorizar la actividad de sus teléfonos móviles.
Vía | The Verge