El CES 2025 ha llegado a su fin dejando entre otras cosas curiosidades como la llegada de los robots aspiradores con brazos y patas, algunos de los mejores y más originales televisores que veremos este año o innovaciones como el primer portátil con pantalla enrollable del mundo. Porque la feria de Las Vegas se centra esencialmente en el hogar, pero también deja inventos para los smartphone como esta especie de tostadora que no lo es tal: es un cargador que alimenta tu móvil en un abrir y cerrar de ojos.
Un cargador de móvil superveloz con letra pequeña
Los fabricantes de teléfonos llevan años apostando por la carga rápida, consiguiendo velocidades tan vertiginosas como los 240W del Realme GT Neo 5, el líder absoluto de la lista de móviles con la carga más rápida. Pero lo que la Swippitt Charging Station, que así se llama, propone es algo completamente diferente. Y ya te adelantamos algo: tampoco es barato.
Solo la base cuesta 245 dólares, pero para que funcione y cargue tan rápido es necesaria la funda. Y a partir de aquí, depende del modelo que elijas, pero por ejemplo para el iPhone 16 Pro el conjunto queda en 328 dólares, envío e impuestos aparte, aunque la cifra puede ascender hasta 570 dólares.
La base es un hub de intercambio de baterías con cinco unidades y la funda especial cuenta con una batería integrada pero extraíble. La idea es la siguiente: tenemos la batería del móvil y la de la funda (de modo que hemos duplicado su autonomía) y al colocar funda y móvil sobre la base, esta detecta la presencia del dispositivo mediante RFID y la sustituye la batería de la funda por otra nueva completamente cargada.
De este modo nunca nos quedamos sin poder usar el móvil porque no tenga batería al recurrir a la batería de la funda, que es la que vamos recambiando. Este vídeo de CNET muestra el funcionamiento del accesorio:
Toca para ir a la publicación de Instagram de CNET
Como puede verse en el vídeo de demostración como en la web del producto, hay diferentes fundas en función del modelo del móvil, admitiendo modelos de Apple, Google y Samsung, ya que cada dispositivo requiere de su móvil con su respectiva funda. Además de la funda y el hub, es necesario instalar una app para asignar la batería, lo que unido al RFID y la compatibilidad permite que este sistema pueda utilizarse en espacios públicos, en caso de popularizarse este invento.
Aunque está disponible en preventa y con descuentos, este sistema se comercializará en 2025 inicialmente para ciertos modelos de iPhone, llegando a Android más tarde.
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Vía | El Español
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