Operadores y Europa, una eterna historia. Los operadores de telecomunicaciones, los grandes, llevan ya cierto tiempo con un discurso unitario, en el que no paran de comparar el viejo continente con otros mercados, sobre todo EEUU, en su afán por conseguir una menor regulación del mercado en busca de una contracción del número de competidores.
Y ya pueden decir que la Comisión Europa les escucha, ya que hoy esta ha anunciado que de acuerdo con los estados miembros el sector de las telecomunicaciones se desregula, en parte. Serán concretamente los mercados minorista de acceso a la red fija y el mercado mayorista de originación de llamadas en redes fijas los que dejarán de estar regulados, en lo que parece el comienzo de una nueva era.
En los últimos días de Neelie Kroes como vicepresidenta de la Comisión y responsable de la agenda digital europea el organismo europeo nos sorprende con esta noticia. Según la nota de prensa emitida los mercados elegidos para ser los primeros en perder la regulación han sido seleccionados por su situación actual. De esta manera el precio de las llamadas desde teléfonos fijos y el alquiler de líneas fijas entre operadores dejará de estar regulado.
Muchos usuarios han dejado ya de lado las llamadas mediante red fija, optando por la vozIP o servicios que ofrecen OTTs y además la competencia en estos mercados está asegurada, siempre según la Comisión, por el número de redes fijas de distinto tipo (cobre, cable, fibra ...) que ya están desplegadas en los distintos países.
Banda Ancha, el punto caliente
La desregulación del mercado de telefonía fija es un paso, aunque pequeño, en el sentido de lo que los grandes operadores vienen reclamando, un mercado menos regulado. Pero es que por lo que la Comisión ha comunicado varios mercados de Banda Ancha serán redifinidos. Sobre ello hay poca información, limitándose a mencionar que se limitarán "a lo estrictamente necesario para obtener una inversión y un acceso de banda ancha competitivos".
Así como el mercado fijo está en un segundo plano a estas alturas cualquier movimiento en el mercado de Banda Ancha puede suponer un terremoto en el sector. De hecho en España aún estamos pendientes de la actualización de la regulación de la Banda Ancha fija, sobre todo por el acceso mayorista a la red de fibra de Movistar, ahora limitado a conexiones de hasta 30 Mbps de bajada.
Parece ser, solo parece, que la CNMC podría eliminar ese límite, en todo el país o por regiones según su competencia, dando barra libre al resto de operadores para acceder a la fibra del ex-monopolio. Una decisión que podría poner el peligro los actuales despliegues de fibra pero que se podría encontrar con la oposición de Europa, en estos nuevos tiempos de desregulación.
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