Las llamadas de WhatsApp no funcionan igual que una llamada telefónica normal: la principal diferencia es que la app de mensajería utiliza un sistema de cifrado de extremo a extremo que evita que otras personas puedan escuchar el contenido de las llamadas. Este sistema también protege los mensajes enviados a través de la aplicación y es clave en un caso de actualidad.
El Tribunal Supremo ha solicitado recientemente a la Unidad Central Operativa (OCU) de la Guardia Civil que intente recuperar los mensajes de los dos números de teléfono a nombre de Álvaro García Ortiz, fiscal general del Estado. También ha hecho lo propio con dos operadoras de telefonía, a las que solicita los datos de las llamadas emitidas y recibidas entre el 8 y el 14 de marzo de 2024.
El cifrado de WhatsApp protege las llamadas y los mensajes que enviamos y recibimos
El motivo por el que se está solicitando la colaboración de la OCU y de las operadoras de telefonía es que tras el análisis de los dispositivos del fiscal, no se han encontrado mensajes. Además, se ha descubierto que García Ortiz habría cambiado de móvil tras ser imputado por la presunta filtración de información sobre Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso.
Según un auto al que han tenido acceso en Europa Press, las operadoras a las que el Tribunal Supremo ha solicitado información sobre las llamadas emitidas y recibidas por el fiscal general del Estado entre el 8 y el 14 de marzo de 2024 son Movistar y Vodafone. Estos serían los días en los que se habrían producido las supuestas filtraciones contra la pareja de Isabel Díaz Ayuso.
El problema es que las llamadas en cuestión se realizaron a través de la popular app de mensajería y al estar cifradas no hay forma alguna de conocer el contenido de las mismas. Aun así, el Tribunal Supremo ha solicitado los paquetes de datos enviados y recibidos durante el periodo mencionado, que podrían proporcionar información adicional que ayude a esclarecer el caso.
El asunto es realmente complejo, ya que a pesar de la petición a las operadoras, no hay mucho que puedan hacer. En un artículo publicado por El Confidencial se recogen las declaraciones del especialista en ciberseguridad Román Ramírez, que afirma que aunque el contenido de las llamadas es imposible de recuperar, podrían cruzarse los datos de tráfico existentes para intentar averiguar los números a los que se llamó usando la aplicación.
En cuanto a la petición realizada a la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, el objetivo es intentar recuperar los mensajes de WhatsApp que habrían sido eliminados de los dispositivos. Al igual que las llamadas, los mensajes que se envían a través de WhatsApp están cifrados y ni siquiera Meta puede leerlos: solo pueden verlos el emisor y el receptor del mensaje.
Aunque los mensajes a priori eliminados puedan parecer imposibles de recuperar, esto no es siempre así. El motivo es que existen equipos de análisis forense digital que podrían utilizarse para recuperar los contenidos del móvil, como los fabricados por la empresa israelí Cellebrite. Hace unos años, el gobierno de España compró quince unidades de uno de los dispositivos de esta empresa que podrían utilizarse en este ocasión. Aun así, expertos en criminalidad informática afirman que recuperar los datos de su móvil será difícil.
El Tribunal Supremo ha citado a declarar al Fiscal General del Estado como imputado el próximo 29 de enero en calidad de investigado.
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