Si echamos la vista atrás, en concreto, hasta noviembre de 2018, recordaremos que Xiaomi se hizo con el control de Meitu, una empresa desarrolladora de aplicaciones fotográficas que se hizo popular, en gran parte, por una peculiar app de filtros. Aunque no es lo único que hacía. Meitu también fabricaba móviles propios, pero hablamos en pasado porque sus últimos resultados financieros no han sido demasiado buenos y han optado por cerrar la división.
En el informe publicado hace apenas unos días, destacan que los ingresos por servicios de Internet han aumentado un 26,3% con respecto a 2017, al igual que los ingresos por publicidad, que se incrementaron en un 101,9%. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, ya que los ingresos de la división de hardware disminuyeron un 50,7% con respecto a 2017, algo que achacan a "la disminución del volumen de ventas de smartphones".
Queda en manos de Xiaomi
La compañía solo lanzó un móvil en todo 2018, el Meitu T9, que se sumaba a los tres lanzados en 2017. En palabras de la empresa, "la división de hardware inteligente registró una pérdida brutal de 62 millones de yuanes (8,7 millones de euros) con un margen del -3,4%". Eso choca con las cifras de 2017, cuando los ingresos brutos fueron de 859,5 millones de yuanes (113 millones de euros) con un margen de beneficio del 23%.
Apuntan que "el mercado de móviles inteligentes de China [su principal mercado] fue desafiante en 2018", ya que los envíos se redujeron un 15,5% en 2018 y esperan que vaya a peor. Así pues, la empresa ha reestructurado su negocio, de forma que empezará a apostar más por la publicidad y dejará los móviles en manos de Xiaomi.
En ese sentido, "Xiaomi será responsable del diseño, investigación y desarrollo, producción y comercialización de todos los futuros teléfonos inteligentes de marca Meitu" durante los próximos 30 años. Meitu, por su parte, seguirá operando de forma independiente desarrollando "tecnologías y algoritmos de imagen". Es una apuesta inteligente, ya que Xiaomi tiene más alcance y posibilidad de escala que Meitu por sí sola, al menos en este sector. Esperan que la división móvil quede reducida a cero para mediados de 2019.
Finalmente, cabe destacar que la pérdida neta de la compañía fue de 1.250 millones de yuanes (155 millones de euros) y que la plantilla de trabajadores se redujo en un 30% con respecto a junio de 2018. Los ingresos totales, por su parte, cayeron un 37,8%.
Sobre los planes de Xiaomi con la licencia de la marca Meitu no sabe demasiado. Lo que se barajó en un primer momento es que Xiaomi pagaría a Meitu un porcentaje de las ganancias de los teléfonos vendidos bajo su marca, aunque se podría optar por un pago general cuando se excediese un número de ventas de terminado o pasasen cinco años del cierre del acuerdo. Esperaremos a ver qué pasa ahora que Xiaomi tiene todo el control.
Vía | Meitu