Si algo está marcando la actualidad del lunes es la primera sesión de investidura. El candidato del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, necesita el apoyo de la Cámara para llegar a la presidencia y para conseguir dichos apoyos ha dado un discurso de cerca de dos horas en el que, entre otras cosas, ha dado a conocer su intención de crear un bono social de acceso a Internet.
No ha dado demasiados detalles sobre su funcionamiento, más allá de que su objetivo es garantizar el acceso a la red por parte de los colectivos más vulnerables o con necesidades especiales. Este se enmarcaría en una "Estrategia de Ciudadanía Digital" y, como señalan en El Economista citando a fuentes cercanas al Ejecutivo, "tiene todas las papeletas para incorporarse en el catálogo de las próximas ediciones del Servicio Universal del Telecomunicaciones, asunto que también tomará cuerpo normativo en el futuro Reglamento Nacional de Telecomunicaciones".
Una "Estrategia de Ciudadanía Digital" con varios puntos clave
Las mismas fuentes que cita el medio afirman que "aún está por ver quién financia los costes del nuevo bono, si lo cubre el Estado, los operadores de telecomunicaciones o si se aplica un sistema mixto público-privado". Este bono no solo cubriría Internet como tal, sino también el teléfono fijo y la línea móvil.
No es la primera vez que oímos hablar de este bono, puesto que el pasado mes de mayo, el PSOE ya lo propuso mediante una enmienda a lo Presupuestos Generales del Estado. El partido cifró el coste de este bono en 50 millones de euros y, como mínimo, se pretendía ofrecer una velocidad mínima de 30 Mbps. Por aquellos entonces, dicho bono se pagaría íntegramente por el Estado sin necesidad de las operadoras.
Básicamente, el bono propuesto por el partido de Sánchez consistía en un descuento en los paquetes de Internet y telefonía "en función de la renta", ya que, en palabras de la enmienda, el acceso a Internet "es un derecho de cualquier persona y una condición indispensable para su pleno desarrollo individual y social". Cabe esperar, por tanto, que el bono propuesto durante el discurso de Sánchez siga la misma premisa.
En el programa electoral del partido puede leerse que uno de los puntos de esta "Estrategia para la Ciudadanía Digital" es garantizar la "conectividad digital y la reducción de brechas". Citando textualmente:
"La falta de conexión a Internet o la existencia de limitaciones a su uso constituye un factor de exclusión social. Entre los tipos de brecha digital se encuentran las derivadas de limitaciones de tipo geográfico, con zonas donde la cobertura no llega o no lo hace en condiciones de calidad; la de género, donde los datos muestran que tanto en empleos como en habilidades digitales existe una diferencia entre la situación de mujeres y hombres en detrimento de las primeras; la generacional, donde hay un grupo de personas, fundamentalmente mayores que tienen dificultades de acceso y de uso; y las relacionadas con los índices de pobreza, donde las personas con escasos recursos económicos directamente no tienen acceso a la Sociedad de la Información".
El bono social de acceso a Internet es solo una de las medidas propuestas por el partido, pero dentro de esa estrategia entra también la creación de "espacio de conexión de acceso público, especialmente en zonas rurales o con riesgo de despoblación", conseguir que "todos los hogares españoles puedan disponer de cobertura de más de 30 Mbps" y garantizar "redes ultra rápidas de 100 Mbps en las escuelas", así como el lanzamiento de la red 5G. Recordemos que el 24 de julio comienza la resintonización de la TDT.
Evidentemente, para que este bono social salga adelante el PSOE tendría que gobernar. De no conseguirse mayoría absoluta, se hará una votación el próximo jueves en la que, para ganar, solo será necesario tener mayor simple, es decir, la mitad de la cámara más uno.
Imagen | FSA-PSOE
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