Gboard tiene un duro contrincante en el que no solemos pensar: el teclado físico. Y aporta muchas ventajas a tu móvil

Teclado físico móvil
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Hace unos años, Apple publicó un anuncio del iPad en el que nos preguntaba qué era un ordenador. Quizá no era el momento para que una tablet sustituyera a un PC, poco a poco, el sistema ha ido cambiando y hoy, tanto una tablet como el móvil, pueden sustituir a un ordenador portátil en algunas situaciones. La clave es utilizar un teclado externo en el móvil, y es algo que cambia la forma de relacionarnos con el dispositivo.

La potencia que llevamos en nuestro bolsillo es descomunal, los procesadores son eficientes, tanto el iPad como los Android cuentan con aplicaciones sustitutivas de las de escritorio, podemos hacer muchísimos trámites con ellos y crear contenido de todo tipo. Ahí es donde un teclado brilla con luz propia.

Trabajar de viaje o en la universidad con el móvil y un teclado sustituyendo a tu portátil

Actualmente, tanto en un iPad como en un dispositivo Android podemos conectar un teclado y un ratón. Puede ser por Bluetooth o por cable en el caso de Android (en un iPhone sólo es compatible un teclado externo, nada de un ratón) y si nunca lo habías probado, o incluso no te lo habías planteado, debes saber que es genial en ciertas circunstancias.

Lo primero es lo primero: conectar un teclado al móvil es tan fácil como enlazarlo a través de Bluetooth como enlazaríamos cualquier otro dispositivo en esta conexión. En Android, como decimos, también puedes usar teclados por USB-C, pero está claro que es más cómodo de manera inalámbrica. No hay que hacer configuración de ningún tipo porque, simplemente, funciona.

Y hay varios motivos por los que puedes querer utilizar un teclado externo en tu móvil. Puedes jugar a algunos juegos (hay que descargar apps adicionales y realizar la configuración, pero jugar a juegos como 'PUBG' con teclado en el móvil es una pasada), escribir más rápido algunos mensajes o, directamente, sustituir a tu ordenador portátil en viajes o en la universidad.

Las clases me pillan lejos a estas alturas, pero puedo contarte mi caso. No me siento bien saliendo de viaje dos o tres días sin el portátil. Son manías mías, pero hay veces que me apaño mucho mejor con un teclado físico que con el virtual no tanto por la agilidad a la hora de escribir (que también) sino para tener toda la pantalla del móvil enfocada en el texto, sin tener el teclado en la mitad inferior.

Teclado físico móvil En cuanto lo conectamos, por Bluetooth o por móvil, nos debería aparecer un aviso con los atajos y opciones para los teclados físicos.

Si hablamos de viajes de trabajo, es impepinable llevar un ordenador portátil en la mochila. Sin embargo, hay viajes en los que sabes que necesitarás un portátil, pero el contenido que vas a crear no precisa de un portátil y, entonces, no vale la pena añadir peso a la mochila.

Un ejemplo es el viaje que hice unas semanas a Raleigh, Carolina del Norte, para visitar la sede occidental de Lenovo. Nos enseñaron un montón de cosas muy interesantes, pero la publicación se podía madurar y no hacía falta tener un portátil con un sistema de escritorio, así que opté por llevar en la mochila un teclado muy compacto, un ratón de viaje y mi móvil. Fue todo mi material de trabajo ese día.

El móvil es el cerebro, pero también una cámara excelente y, para tomar notas y empezar a perfilar el artículo, utilicé el teclado un ratón Bluetooth y la suite ofimática de Google. Dentro de los teclados, puedes conectar el que quieras, pero el mío es uno muy compacto de Microsoft con una tapa que puedes utilizar como soporte para la tablet o el móvil.

De esta manera, lo proteges en la mochila, pero no necesitas un soporte extra. Lo malo es que no tiene touchpad, pero hay opciones como esta de ASHU que, por unos 40 euros, no solo se pliegan, sino que cuenta con touchpad incorporado para que no te haga falta ratón. También hay opciones como este MoKo que se pliegan y son un teclado partido, resultando algo más óptimo a nivel ergonómico por unos 32 euros.

Teclado físico móvil La agilidad del teclado físico es incomparable, sobre todo si te toca hacer textos largos.

Pero bueno, que si en casa tienes algún teclado compacto Bluetooth, puedes empezar a usarlo con el móvil perfectamente. Esto también viene bien por si tienes un iPad con el Magic Keyboard y si, por lo que sea, el teclado deja de funcionar, no te quedas tirado. Y es un caso muy específico porque... nos ha pasado en la redacción.

Así que, ya sabes, tu móvil es el mejor aliado en muchas ocasiones, pero si conectas un teclado se puede convertir además en el perfecto ordenador portátil para clases y viajes en los que quieras ir con poco peso.

En Xataka Móvil | Alternativas a Gboard: las mejores aplicaciones de teclado para Android y iOS

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