Valoraciones, análisis y opiniones aparte, hubo una polémica que envolvió a los Pixel de la pasada generación y que pareció congregar del mismo lado a casi toda la prensa tecnológica. La pantalla OLED del Pixel 2 XL distaba mucho de contar con la calidad esperada para un teléfono situado en la gama alta, tanto por precio como por especificaciones.
LG fue el responsable de construir dicha pantalla, con la tecnología P-OLED, u OLED plástico, que ya utilizó y sigue empleando en terminales propios. Pero dicha pantalla recibió muy malas críticas tanto por los ángulos de visión como por el tintado de los blancos y, posteriormente, por la degradación. Todo ha podido influir para que los coreanos de LG cedan un sitio en la mesa de proveedores a sus compatriotas, Samsung.
iFixit lo ha desvelado, este OLED es Samsung
El Pixel 3 XL ya se ha sometido a diversos análisis por parte de los medios tecnológicos, pero uno de los más relevantes en este sentido ha sido el de iFixit. Como con cada teléfono referencia del mercado, el medio ha sacado los destornilladores y las palancas y ha despiezado el terminal, revelando un dato que hasta ahora no se había anunciado: la procedencia de la pantalla. Samsung reemplaza a LG en los Pixel "gigantes"
El mercado demandaba una evolución para los Pixel en el apartado de pantalla. No para el modelo pequeño, vestido con un panel AMOLED el pasado año y servido por Samsung, ahora con una OLED de LG, sino para el XL que disfrutaba de la pantalla 18:9 y tecnología OLED de LG. La evolución se ha producido, y no sólo en cuestión de calidad, que ya se ha situado como una de las mejores de este 2018, sino en cuestión de procedencia.
Como ha revelado iFixit, el panel OLED del nuevo Google Pixel 3 XL ha salido de las fábricas de Samsung. Un panel de 6,3 pulgadas, con resolución de 2.960 x 1.440 píxeles, 523 píxeles por pulgada y un aspecto de 18.5:9 con notch. La pantalla es además compatible con el sistema Always-on, y con contenidos en HDR.
Por desgracia, como indica también iFixit, la pantalla tiene un extra de dificultad a la hora de la reparación, pues hace falta desmontar completamente el teléfono para poder separarla del mismo. Algo que tendrá que solucionar el fabricante cuando sea necesario pasar por el servicio técnico. Pero en lo que a los usuarios atañe de forma directa, LG ha desaparecido de la ecuación en el modelo superior y ha entrado Samsung. Intercambio de papeles, intercambio de modelos. Veremos las críticas de ambos.
Vía | iFixit
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