Como era de esperar, ha llegado el ecuador del año y Qualcomm ha renovado, aunque de forma tímida, su procesador de gama alta. El Snapdragon 888 seguirá existiendo y circulando pero ahora le llega un compañero de batalla, un nuevo Snapdragon 888 Plus que presenta algunas evoluciones sobre su (ahora) hermano menor.
Es el momento, por tanto, de enfrentar ambos procesadores para ver qué ha cambiado Qualcomm entre ellos en estos seis meses que los separan. Pero recordemos que se trata de una transición intermedia y que los auténticos cambios no llegarán hasta que en diciembre se presente el sucesor, ahora real, del Snapdragon 888 que conocimos el pasado mes de diciembre de 2020.
Un cerebro más potente y un 20% más inteligente
Echando un vistazo a la tripas de ambos procesadores, lo cierto es que es sencillo concluir que el Snapdragon 888 Plus 5G es una actualización un tanto menor del Snapdragon 888 5G debido a que no parecen muchos los cambios aplicados. Vemos que los dos procesadores comparten el mismo ISP Spectra, el mismo módem Snapdragon e incluso la misma tecnología para los núcleos y la misma gráfica.
Hasta el chip responsable de la inteligencia artificial, el Hexagon 780 triple, es el mismo, pero entre estos dos procesadores hay cambios sustanciales a nivel de potencia que van un poco más allá de un simple 'overclock' realizado sobre la CPU y el chip Hexagon, debido a que el Hexagon cobra más y más importancia con cada nueva generación del fabricante norteamericano.
Con este salto intermedio entre generaciones, Qualcomm mantiene la tecnología Kryo 680 Prime, Gold y Silver para los núcleos de su CPU, que están basados en los Cortex X1, Cortex A78 y Cortex A55 de ARM. Lo que ocurre es que la frecuencia de reloj aumenta desde los 2,84GHz originales hasta 3GHz en el Snapdragon 888 Plus 5G. Esto supone un crecimiento de entre un 10% y un 15% de potencia entre generaciones.
El gran salto, sin embargo, se produce a nivel de inteligencia artificial. Es decir, en el Hexagon 780 triple. Con la nueva generación incluida a bordo del Snapdragon 888 Plus 5G, el Hexagon 780 es capaz de realizar 32 billones de operaciones por segundo (trillones norteamericanos) y eso supone un aumento de un 20% en potencia con respecto al Snapdragon 888 original.
Inteligencia artificial que, con la evolución de los chips de los últimos años, interviene tanto en fotografía como en el apartado gráfico y, claro está, en la potencia para ejecutar apps y juegos. Así pues, el nuevo Snapdragon 888 Plus 5G evoluciona en cuanto a potencia bruta pero también en la ejecución de código de IA que interviene prácticamente en todas las áreas de un teléfono móvil. Un gran salto entre chips que veremos en circulación en la segunda mitad del año.
