Si los Reyes Magos te han traído un móvil, tienes por delante la importante tarea de pasar los datos del viejo móvil al nuevo. Es un trabajo que puede ser más o menos laborioso dependiendo de varios factores, pero al final pasar los contactos, las fotos y las apps es relativamente sencillo, lo que te llevará más días es familiarizarte con tu nuevo móvil, sobre todo si cambias de plataforma.
Dar el salto de un iPhone a otro no tiene mayor secreto ya que el sistema es siempre el mismo. La cosa se complica un poco más si cambias de un Android a otro Android de otra marca ya que cada fabricante incluye su propio software, pero al final la plataforma es la misma. ¿Pero qué pasa cuando pasamos de iOS a Android o viceversa? Esto es lo que hay que tener en cuenta al dar el salto entre plataformas móviles.
Cambiar de plataforma es una movida, pero que no cunda el pánico
Por mi trabajo suelo cambiar mucho de móvil, y no sólo eso, sino que también cambio de plataforma, aunque confieso que esto trato de minimizarlo porque, no os voy a mentir: es un rollo y, quieras o no, vas a perder cosas por el camino (algunas apps, la copia de WhatsApp, etc).
No vengo aquí a decir qué sistema operativo es mejor. De hecho, desde que tengo smartphone he ido cambiando entre iOS y Android y no me veo casándome con ninguna plataforma. Actualmente tengo iPhone, pero sé que llegará el día que me canse y empiece a echar de menos Android. Siempre ha sido así, por lo que no esperéis de mí una oda a ninguna plataforma.
Dicho esto, cada sistema operativo tiene un enfoque distinto y, para alguien que lleva años usando una plataforma, dar el salto a la otra puede ser un poco shock al principio. El objetivo de este artículo es resumir los aspectos que más difieren entre ambos sistemas, así como daros algunos consejos útiles a la hora de cambiar.
Sistema cerrado vs sistema abierto
Seguramente hayas oído hablar eso de que Android es un sistema abierto, mientras que iOS es un sistema cerrado. ¿Qué significa esto? Resumiéndolo mucho, significa que en Android vas a tener mucha más libertad que en iOS a la hora de personalizar la interfaz del móvil o descargar apps que no están en la tienda oficial.
iOS ha ido abriendo un poco la mano, pero la personalización sigue estando lejos de lo que ofrece Android. Con un móvil Android podemos instalar un launcher y cambiar radicalmente la pantalla de inicio, desde la forma y diseño de los iconos hasta el tamaño de la cuadrícula, pasando por los menús. Cuánto quieras complicarte es cosa tuya, pero las posibilidades son enormes.
Por su parte, Apple nos deja cambiar el fondo de pantalla, elegir el modo claro u oscuro y poco más. Desde iOS 14 existe un truco para cambiar el diseño de los iconos, pero necesitas paciencia porque tendrás que ir uno a uno. También puedes añadir widgets y que tu pantalla de inicio no sean todo iconos.
Con respecto a la descarga de aplicaciones, en iOS solamente vas a poder hacerlo desde la App Store, mientras que en Android es posible usar tiendas alternativas además de la oficial, como la tienda de apps de Amazon, Uptodown, Aptoide y otras. Además, podrás descargar e instalar cualquier app en formato APK. El problema de esto es la seguridad, y es que así es como entra la mayoría del malware en Android, mientras que en iPhone estamos mucho más protegidos ante apps fraudulentas.
El cajón de aplicaciones (o la ausencia de él)
Una de las principales diferencias en la interfaz de ambas plataformas es el cajón de aplicaciones. En iPhone, los iconos de las aplicaciones se organizan en las distintas pantallas de inicio. Podemos hacer carpetas y agruparlos o, desde iOS 14, ocultar las apps para que se muestren en la biblioteca de apps (se abre deslizando hacia la izquierda), pero por defecto todas las apps están en la pantalla de inicio.
En Android tenemos el cajón de apps, aunque no todos los fabricantes lo traen activado de serie, pero se puede activar si lo deseamos. El concepto del cajón de apps es que en la pantalla de inicio tengamos solamente aquellas apps que usamos más y en el cajón guardemos el resto. Para abrir el cajón de apps, hay que deslizar hacia arriba.
Botones y/o gestos de navegación
La forma de movernos por los distintos sistemas es parecida, pero no igual. En Android tradicionalmente hemos usado los botones de navegación que ves sobre estas líneas. Tenemos el botón de retroceder, el botón que nos lleva a la pantalla de inicio y el de las apps abiertas recientemente, también conocido como multitarea.
Todos los móviles Android permiten activar los botones de navegación, pero desde hace un tiempo la mayoría también funciona mediante gestos y, en muchos casos, vienen activados por defecto. Los gestos básicos son los siguientes (puedes consultarlos todos aquí):
- Volver a la pantalla de inicio: deslizar desde el borde inferior.
- Volver atrás: deslizar desde el borde derecho o izquierdo de la pantalla.
- Abrir apps recientes: deslizar desde el borde inferior y mantener.
Con la llegada del iPhone X y la eliminación del botón de inicio, llegaron los gestos que se mantienen a día de hoy en todos los nuevos modelos de iPhone a excepción del iPhone SE que sí tiene botón. Aquí no tenemos botones de navegación como en Android, pero los gestos son muy parecidos (aquí tienes todos los disponibles):
- Volver a la pantalla de inicio: deslizar desde el borde inferior.
- Volver atrás: deslizar desde el borde izquierdo de la pantalla.
- Abrir apps recientes: deslizar desde el borde inferior y mantener.
Como decía, actualmente estoy usando un iPhone y quizá lo que más echo de menos es el gesto/botón de volver atrás. En el iPhone solamente podemos volver si deslizamos desde el borde izquierdo y es bastante incómodo si eres diestra y usas el móvil con una sola mano. Por lo demás, el manejo no dista demasiado y en unos días te podrás acostumbrar.
Las tienda de apps: App Store vs Google Play
Esto no te supondrá demasiado choque ya que ambas tiendas cuentan con una estructura similar. En la pantalla principal se mostrarán sugerencias para ti y otros destacados, pero también se puede navegar por categorías o buscar apps directamente.
Tanto Google Play en Android como App Store en iOS cuentan con un enorme catálogo de apps y los principales títulos están en ambas plataformas, pero habrá otros que solamente encontrarás en una de ellas. Si nos fijamos en los números totales, según datos actuales, Google Play gana con 2,87 millones de apps, mientras que la tienda de Apple cuenta con 1,96 millones.
Los asistentes de voz: Siri vs Google Assistant
Tanto Siri como el Asistente de Google son dos asistentes de voz muy completos a los que podemos preguntar prácticamente todo, pero hay algunas diferencias como la forma de invocarlos. En iPhone, puedes usar 'Oye Siri' o mantener pulsado el botón del lateral derecho y Siri aparecerá para ayudarte en lo que necesites.
En el caso de Android, la palabra de activación será 'Ok Google' y no tenemos un botón común a todos los móviles para activarlo, pero normalmente podemos hacerlo deslizando desde las esquinas inferiores o directamente pulsando el micrófono que aparece en el widget de búsqueda de Google.
Las actualizaciones
Decía al principio que la misión de este artículo no es decir qué sistema es mejor, pero en el caso de las actualizaciones hay que hacer una excepción ya que Apple barre totalmente a Google en este terreno. Son las ventajas de tener un sistema cerrado con un único fabricante, y es que la mayoría de iPhone se actualizan durante años. Por ejemplo, los iPhone 6S recibieron iOS 15 hace unos meses, móviles que llegaron al mercado en 2016. Además, cuando llega una nueva versión se lanza para todos los iPhone compatibles a la vez.
Por su parte, en Android las actualizaciones no llegan tan rápido, eso si llegan. Según los últimos datos de distribución publicados en noviembre, sólo un 24% de móviles tiene Android 11 y ya han presentado Android 12. Los únicos que tienen garantía de actualización rápida durante tres años son los Google Pixel. Los gama alta de otros fabricantes también se suelen actualizar durante varios años, pero lo normal es que toque esperar.
Desbloquear el móvil
Como decía, desde el iPhone X Apple eliminó el botón físico de inicio y con él también desapareció el lector de huellas TouchID. Desde entonces, a excepción del iPhone SE, todos los modelos de iPhone cuentan con el desbloqueo facial mediante FaceID. Es un sistema muy seguro que proyecta una matriz de puntos en el rostro, por lo que no se puede engañar con una foto.
En el caso de Android, excepto alguna excepción, la inmensa mayoría cuenta con un lector de huellas bajo la pantalla, en el lateral o en la trasera y en esta época de mascarillas, viene muy bien tenerlo. Casi todos tienen también desbloqueo facial, pero a excepción de los Pixel 4, es desbloqueo 2D y sí se puede saltar usando una imagen, por lo que no es tan seguro.
Ecosistema y conexión con otros dispositivos
Por último queda un punto que no afectará a todo el mundo, pero que es muy importante si es tu caso y es si el nuevo móvil será compatible con otros dispositivos como altavoces inteligentes, smartwatch, televisores y otros. Si tenías aparatos compatibles con Android y estás pasando a iPhone, casi al 100% podrás usarlos con tu nuevo móvil, pero si es al revés la cosa se complica.
¿Te acuerdas lo de sistema abierto vs cerrado que hablábamos más arriba? Pues también afecta al ecosistema de productos. La mayoría de relojes o pulseras de actividad van a funcionar con iPhone, también podrás lanzar contenido a tu Google Home o Chromecast sin problemas. Por ejemplo yo uso una Fitbit Versa 2 y funciona igual en iPhone que en Android ya que solamente he de descargar la app de Fitbit para sincronizarla.
En cambio, si te estás pasando a Android y tenías un Apple Watch, olvídate de poder usarlo con tu nuevo móvil. Tampoco podrás aprovechar todas las funciones de los AirPods, pero sí usarlos como auriculares Bluetooth normales. Esto también pasa al revés si tienes los Pixel Buds de Google y te pasas a iPhone.
Hay muchos más aspectos que seguro encontrarás diferentes entre las dos plataformas, pero estos son los que pueden resultar más chocantes cuando hacemos el cambio. Ahora a disfrutar de tu nuevo móvil.
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