Con el modelo de televisión en streaming ya asentado, las salas de cine tenían que reinventarse. Y más observando su caída en ingresos tras el inicio de la pandemia del COVID-19. Para los más fans de consumir películas en una sala con palomitas en mano, hay buenas noticias.
Y es que esta misma semana Cinesa ha anunciado una nueva suscripción a la que ha llamado 'Unlimited Card'. Y esta es toda una declaración de guerra al streaming, ya que dan acceso ilimitado al cine por un precio que es incluso inferior al de Netflix. Sin embargo, a modo personal no tengo tan claro hasta qué punto es rentable y no una "obligación" de pago más.
Así funciona la nueva 'Unlimited Card' de Cinesa
Si no estás al tanto de esta nueva suscripción que ha lanzado Cinesa, te haré un resumen rápido. Es simple y llanamente un nuevo modelo de suscripción que comenzará el próximo mes de abril y que permitirá que podamos ir al cine tantas veces como queramos. Sin límites (de ahí el 'Unlimited').
Catalogada también como la tarifa plana de Cinesa, tiene diferentes modalidades de pago, que también cuentan con diferentes ventajas:
- 'Unlimited Stantard' por 15,90 euros al mes incluye el acceso a todas las salas de Cinesa (no 'LUXE') e incluye las butacas VIP.
- 'Unlimited Standard' por 190,80 euros al año con las mismas ventajas que el anterior, pero en pago anual. De momento, cuenta con una promoción inicial que lo rebaja a 149 euros al año.
- 'Unlimited LUXE' por 18,90 euros al mes incluye el acceso a todas las salas, incluyendo las 'Luxe' y las butacas VIP.
- 'Unlimited LUXE' por 226,80 euros al año con las mismas ventajas que el anterior, pero en pago anual. De momento, cuenta con una promoción inicial que lo rebaja a 189 euros al año.
Cabe decir que estos planes incluyen absolutamente todas las películas de estreno y ofrecen ventajas como obtener invitaciones en pases especiales, así como descuentos en palomitas, bebidas y otros menús en Cinesa. Además indicaron que habrá más ventajas, aunque aún no han desvelado ninguna más.
Llega en un buen momento. O eso parece
Si bien el descenso de ingresos sufridos en 2020 ha cambiado su tendencia hacia la creciente y que fue general a todas las salas de cine, Cinesa en concreto ha optado por tomar esta decisión en un momento que podría ser clave. Y es que puede aprovechar la sensación de hartazgo con las plataformas que se percibe a costa de polémicas como la prohibición de compartir cuentas gratis en Netflix o la falta de estrenos potentes.
También que haya cada vez más plataformas podría jugar en su favor. De hecho hay quién se plantea volver al formato físico, por lo que acudir de nuevo a las salas de cine puede ser un gran aliciente para aquellos que lo abandonaron (total o parcialmente) en favor de las plataformas.
De hecho, siguiendo con el ejemplo de Netflix como una de las pioneras y con más suscriptores nos encontramos con que el precio de la suscripción de Cinesa es más bajo que su plan más premium. Si observamos los precios de Netflix comprobamos como para tener la mejor propuesta de calidad de imagen y sonido hemos de pagar 17,99 euros al mes. Cualquiera de los planes 'Standar' de Cinesa lo mejora.
De hecho, podemos encontrar ventajas de cara al streaming como poder ver antes las películas. Y es que, aunque la ventana de distribución es cada vez más estrecha, seguimos en ocasiones tardando demasiado en ver aterrizar películas en plataformas. Sin ir más lejos, la recién oscarizada 'Todo a la vez en todas partes' sólo está en Movistar Plus+.
Por supuesto el ahorro de dinero es algo a considerar muy en serio si somos cinéfilos. Que siempre está el clásico miércoles como día del espectador para obtener descuentos, pero si acudimos de forma habitual acaba siendo un buen dinero a final de año. Y por supuesto, no obviamos la calidad de imagen y sonido que se obtiene en la sala de cine, aportando una experiencia muy diferente a la de la mayoría de los hogares.
Pero, hay un pero.
¿Y si acaba siendo una carga más?
Sala de cine (Imagen: Cinesa)
Enfoco esta reflexión a título personal, pero estoy convencido de que muchos pensarán igual que yo. A priori esta suscripción suena tentadora, pero puede ser un arma de doble filo. No me caracterizo por ser un ferviente consumidor de cine como para acudir cada semana, pero sí al menos una vez al mes. Y lo disfruto mucho.
Sin embargo, creo que una suscripción podría obligarme indirectamente a ir al cine en circunstancias en las que normalmente no habría ido. Aquí entra de lleno aquello de querer amortizar bien la suscripción y especialmente si estamos en una anual. Acudir a ver películas que no nos llamen especialmente la atención por aquello de que ya está pagao'.
Y en este sentido tiene muchas papeletas de convertirse en una carga. Insisto, todo si tenemos en cuenta la suscripción anual, ya que la mensual puede ser en cierto modo más atractiva si hay meses en los que no se vislumbren estrenos potentes. Porque no olvidemos que al fin y al cabo, haya más o menos estrenos potentes, en plataformas encontramos contenido casi infinito. En cines, es más limitado.
Por otro lado, este es un formato de suscripción joven. Tanto que oficialmente ni siquiera nacerá hasta abril. Y siendo Cinesa la única que lo ofrece, temo que pueda resultar inaccesible para muchos. En mi caso personal tengo buena imagen de Cinesa y aparte tengo varias salas suyas cerca de dónde vivo, pero no es lo habitual en toda la población.
Así, al igual que las plataformas son al final accesibles por cualquiera que tenga acceso a Internet y un móvil, tablet ordenador o Smart TV, esta suscripción no. Que oye, no voy a pedir imposibles y solicitar a Cinesa que monte salas en cada localidad y en cada barrio, pero sí creo (y espero) que sirva como empujón a otras grandes empresas poseedoras de salas de cine a crear lo suyo propio.
Imagen de portada | Álvaro García M. con Midjourney
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