La tecnología OLED está ganando la partida en el mercado al LCD, aunque esta última aún se resiste a retirarse definitivamente y tiene apoyos como el de Sharp, en manos de Foxconn, que ahora busca cómo construir una fábrica en los mismísimos Estados Unidos de Trump. La avalancha de paneles OLED es ya imparable, y desde que comenzaron a ser más baratos de construir que los propios LCD fue todo a más.
Como siempre, los grandes fabricantes son los que marcan la tendencia, y desde hace ya meses venimos leyendo que el segundo fabricante a nivel mundial seguirá los pasos del primero, y dará el último empujón para que el OLED se convierta en mayoritario. Hablamos de Apple con su iPhone, cuyo modelo para la décima generación, el iPhone 8, lleva tiempo asociado a un futuro panel OLED. Ahora parece todo confirmado.
Un contrato suculento para Samsung
Dada la ingente cantidad de pantallas OLED que requeriría Apple para sus iPhone, no en vano vende en torno a 200 millones de terminales cada año, los posibles proveedores eran muy limitados. Con algunos constructores de pantallas haciendo el cambio a OLED, como Japan Display, la opción de Samsung parecía la más lógica y un contrato ha acabado por confirmar lo que todos sospechaban desde hace tiempo.
Los rumores y filtraciones apuntaban a un iPhone 8 con pantalla OLED y Samsung ha hecho público que ha conseguido para si un contrato de 4.300 millones de dólares, un dinero que Apple les pagará por surtirles de pantallas con tecnología OLED, y no hablamos de las pantallas para el Apple Watch. Hablamos de las pantallas del futuro iPhone 8, si es que finalmente se llama así y no 7s o iPhone 10º Aniversario.
La capacidad de producción de paneles OLED de Samsung se sitúa en estos momentos en torno a los 160 millones de paneles anuales, lo que supondría aproximadamente un 80% de los requerimientos de Apple para hacer el cambio desde el LCD. Ocurre, sin embargo, que Samsung está construyendo más líneas de producción de OLED, y que se rumoreaba que Apple haría la transición al OLED en un par de años, con una producción menor en la primera generación.
Por ahora sólo resta esperar. Sabemos que el futuro iPhone 8 llegará en el mes de septiembre, salvo que se cambie la tendencia seguida por Apple en los últimos años, y que podría costar más de 1.000 euros. Ahora ya sabemos que tendrá una pantalla OLED. Ya veremos si se trata de un único modelo o de toda la generación de iPhones de 2017. Otra cosa que sabemos es que, cuando esto ocurre, serán más eficientes desde el punto de vista energético.
El resto de rumores sobre la carga inalámbrica, los tamaños y las resoluciones quedan por ahora sin confirmar. Sólo resta esperar a que se vaya acercando la fecha de presentación para que los rumores se acentúen y las filtraciones, sobre todo las de fuentes fiables, comiencen a asaltar los medios. A esperar qué más tiene preparado para nosotros el futuro iPhone 8 con pantalla OLED.
Vía | SamMobile
En Xataka Móvil | Samsung fabricaría más de la mitad de las pantallas AMOLED del iPhone 8
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