Existen pocos rituales en el sector tecnológico como el inicio de las ventas de cada nuevo iPhone. Los usuarios se forman en interminables colas frente a las Apple Store a la espera de una apertura de puertas que suele estar acompañada de una bienvenida por todo lo alto por parte de los empleados. Solemos conocer a quien compra el primer iPhone de esa generación pero también cuántos terminales se venden en el primer fin de semana. Hasta este año.
Apple es una compañía que lleva muchos años presumiendo de cifras, y ha tenido motivos más que sobrados para hacerlo. Una de las últimas que conocimos fue la de la venta del iPhone número 1.000 millones y, por supuesto, sabemos sus ventas grosso modo en cada una de sus presentaciones. Pero parece que para conocer el rendimiento del iPhone 7 tendremos que esperar mucho más. Se pondrán a la venta el 16 de septiembre desde 769 euros y no sabremos nada de los hermanos hasta el 26 de octubre.
Según parece, Apple habría tomado la decisión de no desvelar cifras de venta del iPhone en su primer fin de semana. La compañía ha aducido que "sus ventas iniciales no serán nunca más una métrica representativa", de ahí que para saber algo de cómo le ha ido a los dos nuevos modelos de iPhone 7 tengamos que esperar a que los de Cupertino presenten sus cifras trimestrales.
Razones figuradas para todos los gustos
Los comentarios al respecto de esta decisión de Apple no se han hecho esperar y los aficionados a las teorías de la conspiración ya ofrecen posibles razones. Desde que los chicos de Tim Cook temen que sea un fin de semana decepcionante tras las últimas caídas en ventas y beneficios ofrecidos por la compañía hasta la poca confianza que Apple tendría en un modelo con poco rediseño exterior y cuyo mayor aliciente sería la cámara. Más la del modelo Plus que la del modelo de 4,7 pulgadas. Sobre todo calibrando el impacto que tendría el iPhone del décimo aniversario, el que se comercializará en 2017.
Como también comentan en algunos medios, Apple habría podido intentar hacer crecer la cifra de ventas de su primer fin de semana aumentando la lista de países en las que los iPhone 7 y iPhone 7 Plus se pondrían a la venta en primer lugar. Eso explicaría en parte que España volviese a situarse en los vagones de cabeza de la comercialización internacional de la compañía, lugar que no ocupaba desde el ya extinto iPhone 5, varios años atrás.
Algunos analistas ya hablan de que Apple podría ver cómo sus beneficios empiezan a reducirse en un 10% anual, adelantándose así a las cifras que la compañía debe presentar a finales de octubre. Puede que ninguno de estos motivos sea el real o quizá sí, lo cierto es que por primera vez desde hace muchos años no conoceremos qué tal le ha ido a los nuevos niños de la compañía. Puede que justo ahora, en plena crisis con el recall de Samsung y sus Note, fuese el momento de sacar pecho en cuanto a ventas y no esconderlas.
Vía | The Verge
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