No ha pasado tanto tiempo desde que los teléfonos móviles, incluidos los de gama alta, contaban con versiones básicas de 16GB de memoria interna. Algunos, incluso, como modelo único y con la posibilidad de ampliar ésta gracias a una microSD. Otros, ni tan siquiera eso. Hoy, lo normal es que un gigante aterrice con 64GB de espacio, algo que también ocurre en no pocas gamas medias del mercado.
Los sistemas operativos crecen, las aplicaciones pesan cada vez más y el volumen de información que descargamos y almacenamos, ya sea multimedia o de otro tipo, no deja de aumentar, así que los fabricantes se van adaptando a los nuevos requerimientos. Samsung, por ejemplo, quiere liderar el salto a los 128GB de base, y para ello utilizará su propia tecnología SSD.
128GB más baratos gracias a los SSD
Los coreanos son, en la actualidad, los mayores constructores de semiconductores del planeta. Entre los productos que salen de sus fabricas encontramos procesadores, sensores para cámaras y, cómo no, memorias de todo tipo para smartphones. Tanto memorias RAM como almacenamientos internos de Samsung recorren medio mundo, y sustentan en buena medida los ingresos del fabricante año tras año.
Una parte de su fabricación tiene que ver con los teléfonos móviles y otra parte queda enclavada en otros sectores, como el relativo al almacenamiento para televisores, videoconsolas y también ordenadores personales. Es precisamente este último el que Samsung quiere emplear para liderar el salto a los 128GB básicos en móviles.
Samsung quiere emplear sus conocimientos y tecnología de desarrollo de discos SSD para abaratar y mejorar las memorias de 128GB para smartphones
Samsung ha anunciado una nueva línea de discos duros SSD para ordenadores personales entre los que incluye modelos de 4TB, 2TB y también de 1TB. Un anuncio bastante corriente dentro de la tónica de los lanzamientos de los coreanos, pero que lleva añadida una anotación al final, la relativa al mundo de los teléfonos móviles.
El fabricante oriental expresa su deseo de llevar los conocimientos adquiridos, y también la tecnología, durante el desarrollo de sus discos SSD a los teléfonos móviles, de forma que logre abaratar la construcción de memorias de 128GB para smartphones. Al mismo tiempo, quiere acelerar la velocidad de éstas y mejorar su eficiencia, tanto de lectura y escritura como energética.
Dado que este año ya tendremos algún modelo en el mercado con 512GB de almacenamiento interno, se va imponiendo un salto en los modelos básicos y Samsung quiere liderarlo. Si el constructor logra fabricar memorias más veloces, económicas y con mayor capacidad, su principal competidor en el mercado, Toshiba, puede pasarlo mal para recortar distancias con el gigante coreano.
Vía | The Verge
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