Los wearables abrieron hace unos años un universo de posibilidades. Auriculares inalámbricos, relojes inteligentes y pulseras cuantificadoras se han convertido en algo muy popular porque nos permiten una interacción más cómoda con la tecnología. Ahora se están empezando a popularizar los anillos inteligentes, pero ya hay quien está pensando en el siguiente paso: pendientes inteligentes.
De momento, se trata de un dispositivo desarrollado por la Universidad de Washington que se conoce como 'Thermal Earring' y prometen que es capaz de ofrecer una detección de la temperatura de la piel mucho más precisa que la de un smartwatch. Vamos a ver en qué consiste y los usos que pueden tener este tipo de dispositivos.
Un pendiente para medir la temperatura
Como decimos, el universo de los wearables está más que consolidado en estos momentos. Los relojes inteligentes y los auriculares true wireless demuestran con sus generaciones anuales que el mercado consume este tipo de dispositivos y, además, se añaden mejoras poco a poco.
Hay ciertos cambios en el diseño, pero también encontramos fabricantes que se esfuerzan por ofrecer características nuevas o mediciones más precisas gracias a nuevos sensores o mejoras del algoritmo. Ahora bien, hay otro tipo de wearables, como pueden ser las gafas de Meta y Ray-Ban.
Con ellas no tenemos las notificaciones en una pantalla, sino un dispositivo con el que grabar vídeo, tomar fotos o reproducir sonido sin tener un diseño estridente. En definitiva: la tecnología está consiguiendo cada vez más que complementos y objetos del día a día tengan una función 'smart'.
Eso se ha trasladado a los recientes anillos cuantificadores como el Ultrahuman Ring Air (más otros que hay en el mercado -el de Amazfit- o que llegarán -el de Samsung-) y demuestran que no hace falta una pulsera cuantificadora para… bueno, para obtener parámetros de salud.
Como leemos en Android Police, parece que esa tecnología de los anillos inteligentes es la que han miniaturizado en la Universidad de Washington para conseguir los pendientes inteligentes. El pequeño dispositivo es capaz de leer la temperatura corporal de forma continua a través del lóbulo de la oreja.
En contacto con la piel tenemos el termómetro corporal, pero en la parte que cuelga hay otro sensor que monitoriza la temperatura ambiental para cruzar los datos y mandar al dispositivo nodriza una lectura completa y precisa. Sus responsables afirman que, en sus pruebas, la medición de temperatura corporal fue mucho más consistente que la que se consigue con relojes, y eso es básico para temas de salud, pero muy útil en el proceso de ovulación.
La parte que cuelga se puede personalizar con resinas o piedras preciosas, pero aunque todo esto sea un prototipo, quedan algunos interrogantes por responder, como si habrá una pareja para la otra oreja y si ambos medirán exactamente lo mismo o si cada uno estará encargado de una medición distinta.
Veremos cómo avanza el proyecto, pero es cuestión de tiempo que prácticamente todo lo que llevemos encima en el día a día tenga alguna función 'smart'. Otra cuestión será ver cómo cargamos todo esto, pero bueno.
Más información y fotos | Universidad de Washington
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