Aún no sabemos cuánto va a durar la estela provocada por el primer Razer Phone, el teléfono que, con permiso de algún que otro antecedente ya en el pasado, inauguró lo que hoy conocemos como 'gaming phones', o teléfonos para exprimir de forma más agresiva la experiencia de los videojuegos en los teléfonos móviles.
De aquella primera hornada llegó el Black Shark de Xiaomi, hace tan solo unos meses, y ahora ya tenemos entre manos la que se convertiría en su segunda generación. Un Xiaomi Black Shark 2 cuya existencia ya se daba por segura y que ahora se ha filtrado a través de Geekbench. Y las especificaciones que han salido a la luz no parecen justificar demasiado la renovación.
Un Xiaomi Black Shark de primera generación, con un poco más de RAM
Es básicamente lo que nos encontramos cuando observamos los datos deslizados por GeekBench, la conocida prueba sintética para teléfonos móviles. Una configuración interna tan similar a la del primer Black Shark, que aún está lejos de cumplir su primer año de vida en el mercado, y que no parece justificar una renovación. Al menos no en base a estos primeros datos.
Con el Black Shark original teníamos un teléfono con una pantalla IPS LCD de 5,99 pulgadas, de aspecto 18:9 y con una resolución FullHD+. Eso suponía tener 2.160 x 1.080 píxeles en pantalla y enfrentarnos a una densidad de 400 píxeles por pulgada. En cuanto al corazón, el motor del teléfono, teníamos a un Snapdragon 845 con dos opciones de RAM, una en 6GB y otra en 8GB. En la batería, 4.000 mAh con carga rápida.
Según los datos de este futuro Xiaomi Black Shark 2, al menos los que conocemos por GeekBench, no hay prácticamente ningún cambio. De hecho, el único valor que varía entre generaciones es el de la RAM, que ahora se filtra con 8GB y que invita a pensar que se trataría del modelo base, avanzando así con respecto al Black Shark 1 cuyo suelo era de 6GB.
Así pues, sólo resta esperar a que nuevos datos sobre este Black Shark 2 sigan llegando a los medios a través de filtraciones y rumores con peso específico. Por ahora, todo invita a pensar que la renovación será muy ligera y que habría sido preferible que Xiaomi esperase a, por lo menos, poder cambiar el cerebro por el futuro Snapdragon 855. Veremos qué ocurre finalmente.
Vía | Geekbench