Parece que Google no ha sido ningún revulsivo para Motorola Mobility, o no era la intención de la empresa del buscador cuando decidió su adquisición. Nueve meses más tarde de que se anunciara, los resultados financieros no hablan de buen año para la empresa americana.
Completamente focalizada en Android, como es lógico, y con teléfonos a mi modo de ver tan interesantes como los que pueda tener la competencia, por ejemplo, los nuevos Droid Razr y Razr MAXX, no ha conseguido atraer el interés del público.
Motorola ha publicado unas pérdidas de 121 millones de dólares en su primer trimestre fiscal. Han conseguido poner en el mercado 8.9 millones de dispositivos (tablets y teléfonos), de los cuales 5.1 millones eran Smartphones. Los ingresos totales obtenidos son de 3.100 millones de dólares.
Motorola Mobility sigue mostrándose como una compañía independiente a Google, y es complicado para los chicos de Android gestionar la situación de forma que no parezca que hay privilegios de cara a otros fabricantes, pero quizá vaya siendo hora de echar una mano a la legendaria empresa americana de telecomunicaciones.
También es posible que estén pensando en pasarla a otras manos, se hablaba de Huawei, una vez obtenida la propiedad intelectual que querían de Motorola para hacer a Android más fuerte en el mercado.
Esperando la luz verde en China
Con respecto a la compra, aunque se anunciara el verano pasado, hay detalles importantes que no podemos dejar pasar, ya que a pesar de haber sido aprobada en Europa y Estados Unidos, todavía está en estudio en China, cuestión que puede estar entorpeciendo la estrategia de Google.
Una cifra interesante de cara a comprender la magnitud de la unión es la de número de empleados, Motorola cuenta con algo más de 20.000 en sus filas, y Google, con 33.000 empleados.
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