Moverse en bicicleta tiene muchos beneficios para la salud, a la par que supone un buen entretenimiento y una forma de desplazarse cada vez más extendida. Sin embargo, usar el móvil como navegador GPS para guiarnos puede ser problemático, ya sea por ciudad, carretera o campo.
Ya hemos visto con anterioridad todos los usos del móvil en el coche que acarrean sanción. Y en bici no cambia mucho el asunto, por lo que saber qué podemos hacer y qué no es vital, tanto para evitar multas como accidentes, que es al final de lo que se trata todo.
Usar el móvil en marcha o solo tenerlo en la mano acarrea multa
Cabe destacar ya de primeras que no está prohibido usar el móvil como GPS en bici. De hecho podemos observar como habitualmente hay apps como Google Maps que integran herramientas para ciclistas. Ahora bien, no todo vale y si un agente te detiene haciendo un uso indebido del mismo, podrías llevarte una buena reprimenda y una "receta" de regalo (una multa).
Según nos explica la DGT, y acorde a la Ley de Tráfico, no está permitido manipular el móvil con la bicicleta en movimiento. Como es evidente, esto hace que desviemos completamente la atención del camino y pueda provocar una caída o colisión con algún vehículo o peatón. Por tanto, es considerada una infracción grave.
Aunque no se esté usando directamente el móvil y simplemente se lleve en la mano, también se considera una infracción grave. De esta forma, si un agente de Policía o Guardia Civil observa esta situación, puede sancionar al ciclista con una multa de 200 euros.
Se puede hacer uso del móvil si se está detenido en un lugar apropiado para ello. Si la detención se realiza en mitad de la vía o acera, así como en cualquier otra situación inapropiada, sí puede haber sanción. Aunque en este caso no sería por el uso del móvil, sino por entorpecer la circulación y suponer un peligro para otros vehículos y/o peatones.
Posible multa por usarlo en un soporte y prohibición absoluta de auriculares
Como sucede también al circular con un turismo, recalcamos que no existen los soportes para móvil homologados por la DGT. La normativa no prohíbe el uso de soportes, pero sí puede haber problemas con su colocación, lo cual será siempre a interpretación del agente.
No debería haber ningún problema por llevar el móvil en un soporte del manillar (o en cualquier otra parte de la bici) si no se está interactuando directamente con el smartphone y si este soporte no impide la visibilidad o movilidad de la bicicleta. Ahora, en caso contrario sí que podría haber una sanción de idéntica cuantía a las explicadas anteriormente (200 euros).
Nuevamente relacionando esta normativa de bicis con la de coches, tampoco se permite el uso de auriculares. Da igual que sean de cable o inalámbricos, que se usen para escuchar música, indicaciones por voz del GPS o cualquier otra cosa. El simple hecho de llevarlos puestos dificulta la atención en la conducción (aunque sea en bici) y también es infracción grave y motivo de sanción de 200 euros.
Teniendo en cuenta que no existen permisos de conducción de bicicletas, al menos en España, estas sanciones no implican pérdida de puntos. Y es evidente también decir que, el hecho de que un ciclista tenga carnet de conducir también, no es tampoco motivo para ello si la infracción la cometió en la bici y no en el coche.
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