La crisis y la aparición y crecimiento de nuevos actores en el sector de las telecomunicaciones han hecho mucho daño a los grandes operadores. Ya no es solo la fuga de clientes que se ha producido a operadores virtuales, también han visto decrecer sus ingresos por culpa de aplicaciones como WhatsApp.
Y para detener esa sangría Movistar hizo un movimiento muy inteligente en 2012, lanzar Fusión. Su red fija es mucho mayor que la de sus rivales y ofrecer un producto integral también hace a los clientes más fieles. Con ello y con la apuesta por la fibra y la televisión de pago Movistar ha presentado hoy unas cuentas en las que sus ingresos crecen interanualmente por primera vez desde 2008.
La estrategia de Movistar parece funcionar. Por mucho que se empeñen en empaquetar la televisión en su Fusión, haciendo de su producto convergente una oferta más cara que la de otros operadores, o por mucho que subiesen su precio en cinco euros en la primera mitad del año, el operador ha conseguido remontar la caída de ingresos de los últimos años.
Los ingresos, que han crecido un 0.2% interanual, van acompañados del éxito de Fusión. A cierre del pasado trimestre Movistar contaba con cuatro millones de clientes convergentes, a los que se suman 1.5 millones de líneas móviles adicionales, lo que supone un crecimiento del 14% y 9% respectivamente. De los clientes de Fusión el 28% tienen una conexión de fibra de 100 ó 300 megas y el 58% televisión de pago.
Más accesos fijos, menos móviles
Desgranando, Movistar vio como su planta de clientes con conexión fija creció 45.000 accesos en el trimestre, para alcanzar los 5.9 millones de accesos. De esas conexiones dos millones lo son ya de fibra, tras crecer éstas en 230.000 en los últimos tres meses. También han crecido con fuerza los clientes de televisión de pago, 275.000 más en un trimestre con Canal+ ya integrado, que suman un total de 2.5 millones.
Donde Movistar no se detiene demasiado es en el móvil, ya que es el segmento donde pierde clientes. 17.3 millones de líneas móviles tiene el operador, un 3% menos que el año pasado, pero igualmente en los últimos datos de portabilidades estamos viendo una tendencia a abandonar las pérdidas, que veremos si se confirma en los datos de octubre. Tampoco dan mucho detalles del 4G, mencionando únicamente que ya tienen tres millones de clientes que lo usan.
Un futuro marcado por la fibra y TV de pago
Con estos resultados y con la campaña de Navidad ya cerca, nos queda pensar en cuál puede ser la evolución futura de Movistar. Su lunar es no contar con las mayores competiciones europeas de fútbol en su oferta televisiva, si las tienen Orange y Vodafone, pero a pesar de ello parece que el efecto de esa ausencia no es preocupante para el operador.
Pero pronto, antes de final de año, se adjudicarán los derechos de la Liga española para los próximos tres años, puja en la que parece que el único rival de Movistar será Mediapro, precisamente dueña de los derechos de la Champions. El operador tendrá que echar el resto en esta puja si no quiere que la empresa catalana se quede con los derechos, privando de un contenido relevante a la tele de Movistar si posteriormente no llegan a un acuerdo.
Movistar podría recurrir a la televisión que fabrica con Vestel para atraer clientes en el periodo navideño
El otro punto por donde seguirá peleando Movistar es en fibra. Actualmente ésta ya llega a 13.4 millones de hogares, casi el número de hogares al que tiene previsto llegar Orange en 2020, pero sobre el despliegue cierne la amenaza de la regulación que tiene pendiente de publicar la CNMC.
Todo ello, mezclado con un periodo en el que muchos usuarios suelen cambiar de operador buscando el móvil gratis (o al menos más barato) puede afectar al rumbo de Movistar, ahora bien encaminado. ¿Será la televisión que fabrica con Vestel su arma (ya no) secreta para la Navidad? Lo veremos enseguida.
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